llegaron unos pastores y las echaron de allí. Entonces Moisés se levantó, salió en defensa de las jóvenes y abrevó su rebaño.
Jacob, al ver a Raquel, hija de Labán, su tío, con las ovejas de Labán, hermano de su madre, se acercó, quitó la piedra de la boca del pozo y abrevó las ovejas de su tío Labán.
Pero Abrahán tuvo que llamar la atención a Abimelec porque sus criados se habían apoderado con violencia de un pozo.
Miró a su alrededor, vio que no había nadie, mató al egipcio y lo enterró entre la arena.
Por eso los pastores juntaban primero todos sus rebaños, luego quitaban la piedra y, una vez abrevado el ganado, la volvían a su sitio.