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Referencias Cruzadas

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Éxodo 14:4

Biblia Martin Nieto

Yo endureceré el corazón del Faraón, y os perseguirá; yo seré glorificado a costa del Faraón y de todo su ejército; los egipcios reconocerán que yo soy el Señor'. Y así lo hicieron.

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36 Referencias Cruzadas  

Pues la Escritura dice al Faraón: Te he constituido para mostrar en ti mi poder y para que mi nombre sea anunciado en toda la tierra.

Y los egipcios conocerán que yo soy el Señor, cuando haya extendido mi mano contra Egipto y haya sacado a los israelitas de en medio de ellos'.

Pero yo endureceré el corazón del Faraón y multiplicaré en Egipto mis señales y prodigios.

Pero precisamente por esto te he conservado la vida, para demostrarte mi poder y para que mi nombre sea publicado por toda la tierra.

Para que sepas que soy yo el Señor, voy a golpear con el bastón que tengo en la mano las aguas del río y se convertirán en sangre.

como dice la Escritura: Dios les embotó el espíritu, les dio ojos para no ver y oídos para no oír hasta el día de hoy.

Toda la población del país será movilizada para enterrarlos y permanecerá ante ellos conmemorando el día de mi glorificación, dice el Señor Dios.

Le dirás: Esto dice el Señor Dios: Aquí estoy contra ti, Sidón; en medio de ti seré glorificado. Se sabrá que yo soy el Señor cuando haga justicia en ella y manifieste mi santidad.

Pero cambié de propósito en honor a mi nombre, para que no fuese vilipendiado a los ojos de las gentes entre las que ellos se encontraban, porque había prometido sacar a mi pueblo de Egipto ante los ojos de sus habitantes.

realizaste milagros y prodigios contra el Faraón, contra todos sus siervos y contra el pueblo entero de su país, porque sabías que los habían tratado con arrogancia, y te granjeaste un renombre que todavía hoy dura.

Ahora reconozco que el Señor es más fuerte que todos los dioses, porque ha castigado a los egipcios, que tiranizaban a Israel'.

El Señor endureció el corazón del Faraón, rey de Egipto, que persiguió a los israelitas que habían partido con la frente alta.

Así pues, tiene misericordia de quien quiere, y a quien quiere le endurece el corazón.

Pero el Señor endureció el corazón del Faraón, que no quiso dejarlos ir.

El Faraón pensará que los israelitas andan perdidos por la tierra, y que el desierto les ha cerrado el paso.

Cuando contaron al rey de Egipto que el pueblo había huido, el Faraón y sus servidores cambiaron de idea acerca del pueblo y dijeron: '¿Qué es lo que hemos hecho dejando salir a Israel y quedándonos así sin sus servicios?'.

Los egipcios se lanzaron tras ellos; toda la caballería del Faraón, sus carros y caballeros entraron tras ellos en medio del mar.

Frenó las ruedas de los carros, haciéndolos avanzar pesadamente. Los egipcios se dijeron: 'Huyamos de los israelitas, porque el Señor combate por ellos contra los egipcios'.

Moisés dijo a Aarón: 'Esto era lo que había declarado el Señor cuando dijo: A los que se acercan a mí mostraré mi santidad, y al pueblo entero mostraré mi gloria'. Aarón se calló.

Cuando yo deje desierta la tierra de Egipto y el país sea despojado de cuanto contiene, cuando hiera a todos los que en él habitan, sabrán que yo soy el Señor'.

Yo os haré mi pueblo, seré vuestro Dios y vosotros conoceréis que yo soy el Señor, vuestro Dios, el que os libró de la esclavitud egipcia.

para que cuentes a tus hijos y a tus nietos cómo traté yo a los egipcios y los prodigios que hice en medio de ellos, y sepáis que yo soy el Señor'.

Y los israelitas fueron e hicieron lo que el Señor había mandado a Moisés y a Aarón.

Porque el Señor había decretado que todas estas ciudades endureciesen su corazón para que combatiesen contra los israelitas; y los israelitas los exterminaron por completo y sin piedad, como el Señor se lo había ordenado a Moisés.

Yo te traeré allí, al torrente Quisón, a Sísara, el jefe del ejército de Yabín, con sus carros y sus tropas, y lo entregaré en tus manos'.

Subirás contra mi pueblo Israel como un nublado que cubre el país. Será al fin de los tiempos cuando yo te haga venir a mi tierra a fin de que las gentes me conozcan, al manifestar yo mi santidad en ti, oh Gog, ante sus ojos.

Haré con él justicia mandándole peste y sangre; haré caer una lluvia torrencial, con granizo, fuego y azufre sobre él, sobre sus huestes y sobre los numerosos pueblos que lo acompañan.




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