Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Éxodo 11:10

Biblia Martin Nieto

Y Moisés y Aarón habían realizado todos estos prodigios en presencia del Faraón. Pero el Señor endureció el corazón del Faraón, que no dejó salir de su país a los israelitas.

Ver Capítulo Copiar

17 Referencias Cruzadas  

El Señor le dijo: 'En el camino hacia Egipto recuerda los prodigios que he puesto en tu mano y que tienes que hacer delante del Faraón. Yo endureceré su corazón de modo que no dejará salir al pueblo.

Pero el Señor endureció el corazón del Faraón, que no quiso dejarlos ir.

Pero el Señor endureció el corazón del Faraón, que no dejó salir a los israelitas.

¿Qué tienes tú que decir en contra, si Dios, queriendo manifestar su indignación y dar a conocer su poder, soportó con gran paciencia a los que estaban preparados para la destrucción;

Sabio de mente y robusto de fuerza, ¿quién puede resistirle impunemente?

No seáis testarudos, como fueron los egipcios y el Faraón; Dios los castigó duramente hasta que dejaron salir a los israelitas.

Pero Sijón, rey de Jesbón, no nos permitió pasar por sus dominios, pues el Señor, tu Dios, había hecho inflexible su espíritu y había endurecido su corazón, con el fin de ponerlo en tus manos, como aún lo está hoy.

Les has cegado sus ojos y has embotado su mente para que sus ojos no vean ni su mente comprenda; así no podrán convertirse ni yo los tendré que sanar.

Así pues, tiene misericordia de quien quiere, y a quien quiere le endurece el corazón.

Pero yo endureceré el corazón del Faraón y multiplicaré en Egipto mis señales y prodigios.

Pero el Señor endureció el corazón del Faraón, que no dejó salir al pueblo, como había dicho el Señor.

El Señor dijo a Moisés y a Aarón en Egipto:

Porque el Señor había decretado que todas estas ciudades endureciesen su corazón para que combatiesen contra los israelitas; y los israelitas los exterminaron por completo y sin piedad, como el Señor se lo había ordenado a Moisés.

¿Por qué, Señor, nos haces andar errantes lejos de tus caminos y endureces nuestro corazón para que no te temamos? ¡Oh, vuelve, por amor de tus siervos y de las tribus de tu heredad!

Yo sé bien que el rey de Egipto no os dejará ir a no ser a la fuerza.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios