Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Esdras 1:2

Biblia Martin Nieto

'Así habla Ciro, rey de Persia: El Señor, Dios del cielo, me ha dado todos los reinos de la tierra y me ha encargado de construirle un templo en Jerusalén, en Judá.

Ver Capítulo Copiar

34 Referencias Cruzadas  

el que confirma la palabra de sus servidores y cumple el consejo de sus enviados; el que dice a Jerusalén: Serás habitada, y a las ciudades de Judá: Seréis reconstruidas; yo realzaré sus ruinas;

más aún, te has levantado contra el Señor del cielo: has mandado traer las copas de su templo, y tú, tus dignatarios, tus mujeres y tus concubinas habéis bebido vino en ellas. Has celebrado a los dioses de oro y plata, de bronce, hierro, madera y piedra, que no ven, ni oyen, ni entienden, pero no has glorificado al Dios que tiene en sus manos tu propio aliento y todos tus caminos.

Ante él todos los habitantes de la tierra no valen nada; él hace lo que quiere con las milicias de los cielos y con los habitantes de la tierra. No hay nadie que pueda detener su mano, o le diga: ¿Qué haces?

Todo lo dicho le sobrevino al rey Nabucodonosor.

Pero hay un Dios en el cielo que revela los secretos; él ha querido manifestar al rey Nabucodonosor lo que ha de suceder en el futuro. Voy a explicar tu sueño y las visiones de tu imaginación cuando estabas en la cama.

Él es quien hace cambiar tiempos y estaciones, depone a los reyes y los entroniza, da sabiduría a los sabios y ciencia a los que saben comprender.

He aquí lo que diréis de ellos: 'Dioses que no han hecho ni el cielo ni la tierra desaparecerán de la tierra y de debajo del cielo'.

Esto dice el Señor: El cielo es mi trono y la tierra el escabel de mis pies. ¿Qué casa podríais construirme, y qué lugar para reposo mío?

Te envío un hombre experto y de gran habilidad, Jurán Abí,

Pero, ¿será posible que Dios pueda habitar sobre la tierra? Si los cielos en toda su inmensidad no te pueden contener; ¡cuánto menos este templo que yo he construido!

Los cabezas de familia de Judá y Benjamín, los sacerdotes y levitas, todos los que se sintieron movidos por el Señor, se dispusieron a ir a Jerusalén y reconstruir el templo del Señor.

Dieron dinero a los canteros y a los carpinteros; mandaron víveres, bebidas y aceite a los sidonios y a los tirios para que enviasen por mar madera de cedro desde el Líbano a Jafa, conforme a la autorización que les había dado Ciro, rey de Persia.

Pero Zorobabel, Josué y los otros cabezas de familia de Israel les contestaron: 'Eso no puede ser; debemos construirlo nosotros solos para el Señor, Dios de Israel, como nos ha ordenado Ciro, rey de Persia'.

Dad gracias al Dios del cielo, porque es eterno su amor.

¿Quién ha suscitado del Oriente a aquel que apela a la justicia a cada paso? ¿Quién le entrega las naciones y le somete los reyes? Su espada los reduce a polvo, su arco los dispersa como paja.

el que dice a Ciro: ¡Mi pastor eres, todos mis deseos cumplirás!; el que dice a Jerusalén: Serás reedificada, y al templo: Serás reconstruido.

Esto dice el Señor a Ciro, su ungido, a quien yo tomé de la mano para someter a las naciones y desatar las cinturas de los reyes; para abrir puertas ante él sin dejar que se cierren:

El rey ordenó que fueran traídos y arrojados al foso de los leones aquellos hombres que habían calumniado a Daniel, ellos, sus mujeres y sus hijos. Y aún no habían tocado el suelo del foso, cuando los leones se lanzaron sobre ellos y trituraron todos sus huesos.

Él respondió: 'Soy hebreo y adoro al Señor, Dios del cielo, que hizo el mar y la tierra'.

Y le dijo: Toma estos utensilios y llévalos al templo que está en Jerusalén, y que el templo de Dios sea reconstruido en el mismo sitio.

Año primero del rey Ciro. El rey Ciro ha decretado respecto al templo de Dios en Jerusalén: Que sea reconstruido el templo en el mismo sitio, como lugar en el que se ofrezcan sacrificios. Tendrá treinta metros de alto y treinta de ancho,

para que ofrezcan sacrificios agradables al Dios del cielo y rueguen por la vida del rey y de sus hijos.

'Artajerjes, rey de reyes, a Esdras, sacerdote y escriba experto en la ley de Dios del cielo: ¡Salud!

Al oír estas palabras, yo me senté y me puse a llorar. Permanecí en duelo algunos días, ayunando y orando ante el rey del cielo.

Y exclamé: '¡Ah Señor, Dios del cielo, Dios grande y terrible, que guardas la alianza y la fidelidad con los que te aman y observan tus mandamientos!

Señor, tú has sido muy bueno con tu tierra, has hecho volver a los cautivos de Jacob,

El corazón del rey es canal de agua en manos del Señor, él lo inclina hacia donde quiere.

Yo, con mi gran fuerza y desplegando mi poder he hecho la tierra, los hombres y los animales que existen sobre ella, y se la doy a quien quiero.

Esto dice el Señor: Cuando terminen los setenta años concedidos a Babilonia, yo me ocuparé de vosotros y cumpliré en vosotros mi promesa de restituiros a este lugar.

Daniel permaneció en la corte hasta el año primero del rey Ciro.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios