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Referencias Cruzadas

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Daniel 7:2

Biblia Martin Nieto

Daniel tomó la palabra y dijo: 'Veía yo en visiones durante la noche que los cuatro vientos del cielo agitaban el mar grande;

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13 Referencias Cruzadas  

Después de esto vi cuatro ángeles en pie en los cuatro ángulos de la tierra, que retenían los cuatro vientos de la tierra para que no soplase el viento ni sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.

El ángel me dijo: 'Las aguas que has visto, sobre las que se sienta la prostituta, son los pueblos, las muchedumbres, las naciones y las lenguas.

Y mandará a sus ángeles con potentes trompetas, y reunirán de los cuatro vientos a los elegidos desde uno a otro extremo del mundo'.

Traeré sobre Elán los cuatro vientos de los cuatro puntos cardinales. A todos estos vientos los dispersaré, y no habrá nación adonde no lleguen fugitivos de Elán.

El enigma fue manifestado a Daniel en una visión nocturna. Y bendijo al Dios del cielo,

A continuación, y siempre en mi visión nocturna, vi una cuarta bestia terrible, espantosa, extraordinariamente fuerte. Tenía enormes dientes de hierro, comía y trituraba, y lo sobrante lo pisoteaba con sus patas; era diferente de todas las otras bestias que la habían precedido y tenía diez cuernos.

Yo seguía contemplando en mis visiones nocturnas: En las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre; se dirigió hacia el anciano y se presentó ante él.

Cuando tenía la visión me encontraba en Susa, plaza fuerte de la provincia de Elán, a orillas del río Ulay.

Luego el macho cabrío se hizo extraordinariamente poderoso; pero cuando estaba en la cúspide de su poder, su gran cuerno se partió y, en su lugar, despuntaron otros cuatro bien visibles, hacia los cuatro vientos del cielo.

Una vez afirmado su imperio será destrozado y dividido a los cuatro vientos del cielo. No pasará a sus hijos, ni tendrá el mismo poder; su reino será exterminado y pasará a otros, excluidos sus descendientes.

El ángel me respondió: Son los cuatro vientos del cielo, que salen de la presencia del Señor de toda la tierra.

¡Ah, el rumor de inmensos pueblos!: rumor como el bramido de la mar; rugido de naciones, como el rugido de aguas impetuosas.

El mar ha invadido a Babilonia, la ha ahogado bajo la masa de sus olas.




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