Entonces Herodes, al ver que los magos se habían burlado de él, montó en cólera y mandó matar a todos los niños de Belén y de todo su territorio, de dos años para abajo, según el tiempo que había calculado por los magos.
Entonces Nabucodonosor, lleno de furor y con el rostro desencajado de ira contra Sidrac, Misac y Abdénago, dio orden de que se encendiese el horno siete veces más de lo corriente
El rey les respondió: 'Tened bien presente mi decisión: Si no me decís el sueño y no me dais su interpretación, seréis cortados en pedazos y vuestras casas serán reducidas a un montón de ruinas.
Pero yo os digo que el que se irrite con su hermano será llevado a juicio; el que insulte a su hermano será llevado ante el tribunal supremo, y el que lo injurie gravemente será llevado al fuego.
Después Daniel se presentó a Arioc, a quien el rey había encomendado el exterminio de los sabios de Babilonia, y le dijo: '¡No hagas perecer a los sabios de Babilonia! Llévame ante el rey y yo le daré la interpretación'.
y por este poder que le dio, todos los pueblos, naciones y lenguas temblaban y se estremecían en su presencia. Él mataba a quien quería, dejaba vivir a quien quería, a quien quería exaltaba y humillaba a quien quería.