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Referencias Cruzadas

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Apocalipsis 4:1

Biblia Martin Nieto

Después de esto tuve una visión. Vi una puerta abierta en el cielo; y la voz del principio, la que oí hablarme como con sonido de trompeta, me dijo: 'Sube aquí y te mostraré lo que va a suceder en seguida'.

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21 Referencias Cruzadas  

Y oyeron una voz potente que venía del cielo y que les decía: 'Subid aquí'. Entonces, a la vista de sus enemigos, subieron al cielo en la nube.

El Señor dijo a Moisés: 'Sube a la montaña y estate allí. Yo te daré unas tablas de piedra con la ley y los mandamientos que he escrito para instruirlos'.

Escribe lo que has visto, lo presente y lo que sucederá en seguida.

Caí en éxtasis el día del Señor y oí detrás de mí una voz potente como de trompeta,

En el momento en que salía del agua, vio los cielos abiertos y al Espíritu Santo como una paloma bajando sobre él,

Y me dijo: 'Estas palabras son ciertas y auténticas, y el Señor Dios de los espíritus de los profetas ha enviado a su ángel a mostrar a sus servidores lo que va a suceder en seguida.

El último vertió su copa en el aire, y salió del templo una voz potente que venía del trono: 'Está hecho'.

y dijo: 'Veo los cielos abiertos y al hijo del hombre de pie a la derecha de Dios'.

Cuando venga él, el Espíritu de la verdad, os guiará a la verdad completa. Pues no os hablará por su cuenta, sino que os dirá lo que ha oído y os anunciará las cosas venideras.

Después de bautizar Juan al pueblo y a Jesús, aconteció que, mientras Jesús estaba orando, se abrió el cielo,

Y el Señor dijo a Moisés: 'Baja de nuevo y sube luego con Aarón; pero que los sacerdotes y el pueblo no traspasen el límite para subir hacia el Señor, pues arremetería contra ellos'.

vio el cielo abierto y un objeto a modo de un gran lienzo, que colgado de las cuatro puntas descendía hacia la tierra;

Entonces Juan accedió a ello. Una vez bautizado, Jesús salió del agua; y en esto los cielos se abrieron y vio al Espíritu de Dios descender en forma de paloma y posarse sobre él.

Éstos son los nombres de los israelitas que bajaron a Egipto con Jacob, cada uno con su familia.

El año treinta, el mes cuarto, el día cinco del mes, me encontraba yo entre los deportados junto al río Quebar, cuando se abrieron los cielos y contemplé visiones divinas.

Me volví para ver quién me hablaba; y, al volverme, vi siete candelabros de oro,

Entonces se abrió el templo de Dios, el que está en el cielo, se vio en su templo el arca de su alianza en medio de rayos, voces, truenos, terremotos y fuerte granizada.

Luego vi el cielo abierto, y apareció un caballo blanco; el jinete se llama el fiel, el veraz, y juzga y lucha con justicia.

porque más vale que se te diga: 'Sube acá', que ser humillado en presencia del príncipe. Lo que han visto tus ojos




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