2 Samuel 16:12

Biblia Martin Nieto

Tal vez el Señor vea mi aflicción y me devuelva bien en lugar de esta maldición de hoy'.

Referencias Cruzadas

Hebreos 12:10

Nuestros padres nos educaron lo mejor que pudieron para un tiempo limitado, mientras que Dios lo hace para nuestro verdadero provecho, para comunicarnos su propia santidad.

Deuteronomio 23:5

pues no os salieron a recibir con pan y agua en vuestro viaje cuando veníais de Egipto, sino que llamaron a Balaán, hijo de Beor, desde Petor, en Mesopotamia, y le pagaron para que te maldijese.

Romanos 8:28

Y sabemos que Dios ordena todas las cosas para bien de los que le aman, de los que han sido elegidos según su designio.

Salmos 25:18

Contempla mi miseria y mi dolor, perdona todos mis pecados;

2 Tesalonicenses 1:7

y a vosotros, que sufrís, daros el descanso en compañía nuestra, cuando Jesús, el Señor, aparezca en el cielo con sus ángeles poderosos,

1 Samuel 1:11

y le hizo esta promesa: '¡Oh Señor todopoderoso!, si quieres mirar la aflicción de tu sierva, te acuerdas de mí y me das un hijo varón, yo lo consagraré al Señor por todos los días de su vida, y la navaja no pasará por su cabeza'.

2 Corintios 4:17

Pues el peso momentáneo y ligero de nuestras penalidades produce, sobre toda medida, un peso eterno de gloria

Isaías 27:7

¿Es que el Señor le ha herido, como hirió a sus perseguidores? ¿Le ha dado muerte, como dio muerte a los que le mataban?

2 Samuel 16:13

David y sus hombres continuaron su camino, mientras Semeí iba por la falda del monte, frente a ellos; le insultaba, tiraba piedras y levantaba polvo.

2 Reyes 19:4

Esperamos que el Señor, tu Dios, haya oído todas las palabras del copero mayor, el que ha sido enviado por el rey de Asiria, su señor, a insultar al Dios vivo, y le castigue por las palabras que el Señor, tu Dios, ha oído. Haz una oración por el resto que aún queda'.

Salmos 109:28

Ellos maldicen, pero tú bendices, que ellos se avergüencen y tu siervo se alegre;

Salmos 132:1

Canción de las subidas

Proverbios 25:22

porque así amontonas ascuas sobre su cabeza y el Señor te recompensará.

Proverbios 26:2

Como un pájaro que escapa y una golondrina que vuela, así la maldición sin motivo no tiene efecto.

Deuteronomio 23:6

Pero el Señor, tu Dios, no escuchó a Balaán, e incluso cambió la maldición en bendición en favor tuyo; porque el Señor, tu Dios, te ama.

Salmos 10:14

Pero tú ves la pena y los lamentos, tú los miras y los tomas en tus manos; el desvalido se confía a ti, tú eres el refugio del huérfano.

Joel 2:14

¡Quién sabe si cambiará de idea y dejará tras de sí una bendición, ofrendas para el Señor, vuestro Dios!