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Referencias Cruzadas

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2 Samuel 15:12

Biblia Martin Nieto

Absalón mandó a buscar a su propia ciudad de Guiló a Ajitófel, guilonita, consejero de David, que estuvo con él mientras ofrecía el sacrificio. La conjuración se hizo fuerte y los partidarios de Absalón iban aumentando.

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26 Referencias Cruzadas  

'Un mal siniestro ha caído sobre él: está acostado, no se levantará ya más'.

Cuando comunicaron a David que Ajitófel estaba con Absalón, entre los conjurados, dijo: '¡Te suplico, Señor, que hagas fracasar los planes de Ajitófel!'.

Gosen, Jolón, Guiló; once ciudades con sus aldeas.

Ajitófel, viendo que no se seguía su consejo, aparejó su asno y se fue a su casa, en su ciudad; puso todo en orden y se ahorcó. Así murió, y fue sepultado en el sepulcro de su padre.

Absalón y todos los israelitas dijeron: 'El consejo de Jusay, el arquita, es mejor que el de Ajitófel'. El Señor había decidido traer la ruina sobre Absalón.

Hacen profesión de conocer a Dios, pero le niegan con las obras, pues son odiosos y rebeldes, incapaces de hacer nada bueno.

No hablo de vosotros. Yo sé muy bien a quiénes he elegido; pero debe cumplirse la Escritura: El que come conmigo se ha vuelto contra mí.

El sacrificio del injusto es un sacrilegio, pues lo ofrece con malas intenciones.

Ajitófel era consejero del rey. Yusay, el arquita, era amigo del rey.

Pregonaron un ayuno y pusieron a Nabot a la cabeza de la asamblea.

En las cartas decía: 'Pregonad un ayuno y haced a Nabot sentarse a la cabeza de la asamblea.

Balac hizo como le había mandado Balaán e inmoló un novillo y un carnero en cada altar.

Le llevó al campo de los Centinelas, hacia la cima del Pisga. Levantó siete altares e inmoló en cada uno un novillo y un carnero.

Balaán dijo a Balac: 'Levántame aquí siete altares y prepárame siete novillos y siete carneros'.

Absalón entró en Jerusalén con todos los hombres de Israel. Ajitófel estaba con él.

Elifélet, hijo de Ajitófel, de Guiló;

Hasta mi amigo íntimo, en quien yo confiaba, el que comía mi mismo pan, ha levantado contra mí su calcañar.

¿Qué me importa el incienso traído de Sabá y la caña aromática que viene de lejano país? Vuestros holocaustos no me agradan, ni vuestros sacrificios me complacen.




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