Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




2 Samuel 12:20

Biblia Martin Nieto

Entonces David se levantó del suelo, se bañó, se perfumó, cambió sus ropas, entró en el templo y adoró al Señor. Volvió a su casa, pidió que le sirviesen de comer y comió.

Ver Capítulo Copiar

20 Referencias Cruzadas  

Entonces Job se levantó, rasgó sus vestiduras y se rapó la cabeza. Luego cayó en tierra, adoró y dijo:

Lávate, perfúmate, vístete con los mejores vestidos y vete a la era, pero sin dejarte ver hasta que haya terminado de comer y beber.

Tú, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lávate la cara,

Lleva en todo tiempo vestidos blancos, y que el perfume no falte sobre tu cabeza.

Pero él respondió: 'Hablas como una mujer necia. Si se acepta de Dios el bien, ¿no se ha de aceptar el mal?'. En todo esto no pecó Job con sus labios.

El rey David se presentó ante el Señor y le dijo: '¿Quién soy yo, Señor, y qué es mi casa para que me hayas hecho llegar hasta aquí?

líbrame de todas mis maldades, no me expongas a la burla de los necios.

Metieron el arca del Señor y la colocaron en medio de la tienda que David había levantado para ella. David ofreció al Señor holocaustos y sacrificios de reconciliación.

Tú no me pusiste ungüento en la cabeza, y ésta ha ungido mis pies con perfume.

David se dio cuenta de que sus servidores cuchicheaban entre sí y comprendió que el niño había muerto. David les preguntó: '¿Ha muerto el niño?'. Le respondieron: 'Sí, ha muerto'.

Sus servidores le dijeron: '¿Qué es lo que haces? Cuando el niño vivía, ayunabas y llorabas, ¡y ahora que el niño ha muerto te levantas y comes!'.

Entonces Joab mandó a buscar a Técoa una mujer hábil y le dijo: 'Finge que estás de luto y ponte vestidos de luto; no te perfumes, de modo que parezcas una mujer que, desde hace tiempo, lleva luto por un muerto.

Y el rey dijo a Semeí: 'No morirás'. Y el rey se lo juró.

Venid a adorarlo, hinquemos las rodillas delante del Señor, nuestro creador.

El Señor es misericordioso y compasivo, el Señor es paciente y todo amor;

No te tengas por sabio; teme al Señor y apártate del mal;

Ahora yo te suplico que perdones mi falta; vuelve a estar conmigo, y yo adoraré al Señor'.

Samuel volvió con Saúl, y éste adoró al Señor.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios