El amor consiste en que caminemos según sus mandamientos. Y este mandamiento, tal y como lo habéis recibido desde el principio, es que caminéis en el amor.
no escuches las palabras de tal profeta ni los sueños de tal soñador. El Señor, vuestro Dios, quiere probaros para ver si realmente le amáis con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma.
Queridos míos, no os escribo un mandamiento nuevo, sino un mandamiento viejo, que tenéis desde el principio: el mandamiento viejo es la palabra que habéis oído.