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Referencias Cruzadas

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2 Corintios 8:3

Biblia Martin Nieto

Puedo asegurar que dieron lo que podían, y más aún de lo que podían.

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22 Referencias Cruzadas  

De este modo todos los hombres y mujeres que se sintieron generosos en contribuir a las obras que el Señor había mandado hacer a Moisés trajeron sus ofrendas voluntarias al Señor.

Ofreced de vuestros bienes un tributo al Señor. Todo corazón generoso ofrecerá un tributo al Señor: oro, plata y bronce,

pero nada he querido hacer sin tu consentimiento, a fin de que me hagas esta buena obra no a la fuerza, sino de buena gana.

Los domingos, cada uno de vosotros separe lo que pueda, según lo que gane, sin esperar a mi llegada para hacer la colecta.

Los discípulos, cada uno según sus posibilidades, decidieron enviar socorro a los hermanos de Judea.

Si hiciera esto por propia voluntad, merecería recompensa; pero si lo hago por mandato, cumplo con una misión que se me ha confiado.

El pueblo se gozaba en estos donativos voluntarios, pues los daban con todo el corazón al Señor, y el mismo rey David experimentó una gran alegría.

Apacentad el rebaño que Dios os ha confiado y cuidad de él no a la fuerza, sino de buena gana, como Dios quiere; no por una vil ganancia, sino con generosidad;

el que tenga el don de la palabra, que use de él como el que comunica palabras de Dios; el que presta un servicio que lo haga como mandatario de Dios de manera que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo al cual se debe la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén.

así, en nuestra ternura hacia vosotros, hubiéramos querido entregaros, al mismo tiempo que el evangelio de Dios, nuestra propia vida. ¡Tanto os queríamos!

Soy testigo de lo mucho que se preocupa por vosotros, por los de Laodicea y por los de Hierápolis.

pues es Dios el que obra en vosotros el querer y el obrar, según su voluntad.

Yo soy testigo de que buscan ardientemente a Dios, pero sin saber cómo,

Contigo el poderío el día de tu nacimiento; en las montañas santas, como el rocío, te he engendrado en el seno de la aurora.

¿Dónde están ahora aquellos entusiasmos vuestros por mí? Doy fe de que, si hubiera sido posible, hasta os hubierais arrancado los ojos para dármelos a mí.

Ha hecho lo que ha podido; se ha anticipado a ungir mi cuerpo para la sepultura.




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