Esta vez voy a desencadenar todas mis plagas contra ti y contra tus servidores y contra tu pueblo, para que sepas que no hay otro como yo en toda la tierra.
Ellos tienen poder para cerrar el cielo con el fin de que no llueva durante los días de su predicación; tienen asimismo poder sobre las aguas para cambiarlas en sangre, y poder para herir a la tierra con toda clase de plagas todas las veces que quieran.
Los de Asdod, al ver esto, se dijeron: 'Que no continúe con nosotros el arca del Dios de Israel, porque es muy dura su mano sobre nosotros y sobre Dagón, nuestro Dios'.