y que, cuando llegue, me humille mi Dios por causa vuestra y tenga que llorar por muchos que antes pecaron y no se han arrepentido de la impureza, de la lujuria y el desenfreno a que se entregaron.
Todo Israel ha quebrantado tu ley, se ha extraviado sin querer escuchar tu voz. Por esto nos han sobrevenido las maldiciones que están escritas bajo juramento en la ley de Moisés, siervo de Dios, porque hemos pecado contra él.
Zacarías, hijo del sacerdote Yehoyadá, poseído del espíritu de Dios se presentó ante el pueblo y dijo: 'Esto dice Dios: ¿Por qué quebrantáis los mandamientos del Señor? No triunfaréis, pues si vosotros abandonáis al Señor, él os abandonará a vosotros'.
si ellos, volviendo en sí en el país a que hayan sido deportados, se convierten y te suplican en la tierra de su cautividad, diciendo: Hemos pecado, hemos obrado inicua e injustamente;
Con violencia e injusticia fue apresado; de su causa, ¿quién se cuida? Fue arrancado de la tierra de los vivos, herido de muerte por los pecados de mi pueblo.
Por lo tanto, el que quebrante uno solo de estos preceptos mínimos y lo enseñe así a los hombres será tenido por el menor en el reino de Dios. Pero el que los cumpla y enseñe será tenido por grande en el reino de Dios.