Debes ponerlos al servicio del santuario, para que cuiden de todo lo que hay dentro de ese lugar santo. Se encargarán de transportar el santuario y todo lo que hay allí dentro, y también acamparán a su alrededor.
Encima le pondrán unas pieles finas, extenderán sobre ellas una tela azul, y luego le pondrán las barras de madera que se usan para transportar el cofre.
»Para el santuario quiero que hagas diez cortinas de doce metros y medio de largo por dos de ancho, y en ellas bordarás dos querubines. Las cortinas serán de tela de lino fino, tela morada, tela azul y tela roja, y el bordado debe ser un trabajo bien hecho.