Números 22:8

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

Y Balaam les dijo: «Quédense aquí esta noche. Mañana les diré lo que Dios quiere que yo haga». Así lo hicieron.

Referencias Cruzadas

Ezequiel 33:31

Y así lo hacen: llegan, se sientan delante de ti, y te prestan atención. Para ellos, tú eres como un cantante de dulce voz, que sabe tocar bien su instrumento musical, y que le canta al amor. Les gusta mucho cómo hablas, pero les gusta más el dinero. Te oyen, pero no hacen lo que les dices.

Jeremías 12:2

Tú los plantas como a los árboles, y ellos echan raíces, crecen y dan fruto. Te alaban con los labios, pero te niegan con sus hechos.

Números 23:12

—Yo solo puedo decir lo que Dios me manda.

Números 12:6

les dijo: «Óiganme bien. ¿Por qué se atreven a hablar mal de Moisés? Ustedes saben que cuando yo quiero decirles algo por medio de un profeta, le hablo a este por medio de visiones y de sueños. Pero con Moisés, que es el más fiel de todos mis servidores, hablo cara a cara. A él le digo las cosas claramente, y dejo que me vea».

Números 22:7

Los líderes de Moab y de Madián le llevaron el mensaje a Balaam. También le llevaron dinero para que maldijera a los israelitas.

Números 22:9

Esa noche Dios se le apareció a Balaam y le preguntó: —¿Quiénes son esos hombres que están contigo?

Números 22:18

Pero a pesar de eso, Balaam dijo: «Aunque Balac me ofrezca su palacio repleto de oro y de plata, no haré lo que me pide. ¡No puedo desobedecer al Dios de Israel!

Números 22:38

Y Balaam contestó: —Aquí me tienes, pero solo diré lo que Dios me ordene.

Números 23:3

Entonces Balaam le dijo a Balac: «Quédate aquí. Yo debo esperar a que Dios venga y me diga lo que debo hacer». Balaam se fue a un lugar alto y solitario.

Números 24:13

aunque me dieras tu palacio repleto de oro y plata, no podría desobedecer a Dios. ¡Solo puedo decir lo que él me manda!

1 Reyes 13:8

Pero el profeta le contestó: —Aunque me des la mitad de tu palacio, no iré. Tampoco comeré o beberé en este lugar,

1 Reyes 22:14

Pero Micaías le contestó: —Juro por Dios que solo diré lo que Dios me diga.