»Dios también me envió para anunciar: “Este es el tiempo que Dios eligió para darnos salvación, y para vengarse de nuestros enemigos”. »Dios también me envió para consolar a los tristes,
y dijo: «¡Habitantes de Jerusalén! ¡Cómo me gustaría que hoy ustedes pudieran entender lo que significa vivir en paz! Pero no, ustedes son incapaces de comprenderlo.
Así, cuando llegue el año de liberación, ellos se quedarán para siempre con nuestros terrenos. Y nuestra tribu perderá parte del territorio que le tocó».
Dios dijo: «¡Miren a mi elegido, al que he llamado a mi servicio! Él cuenta con mi apoyo; yo mismo lo elegí, y él me llena de alegría. »He puesto en él mi espíritu, y hará justicia entre las naciones.