Recuerden que, por mirar hacia atrás, la esposa de Lot se convirtió en estatua de sal.
Pero la esposa de Lot miró hacia atrás, y quedó convertida en estatua de sal.
Tan pronto como los sacaron, uno de los ángeles dijo: —¡Si quieren salvarse, corran! ¡No miren hacia atrás, ni se detengan en el valle! ¡Huyan a las montañas, y pónganse a salvo! De lo contrario, ¡serán destruidos!
Los que quieran salvar su vida, la perderán. Pero los que la pierdan, se salvarán.