Los padres respondieron: —De que este es nuestro hijo, y de que nació ciego, no tenemos ninguna duda.
y les preguntaron: —¿Es este su hijo? ¿Es cierto que nació ciego? ¿Cómo es que ahora puede ver?
Pero no sabemos cómo es que ya puede ver, ni quién lo sanó. Pregúntenselo a él, pues ya es mayor de edad y puede contestar por sí mismo.
Jesús le preguntó al padre: —¿Desde cuándo le pasa esto? El padre respondió: —Desde que era pequeño.