Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Juan 21:17

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

Por tercera vez le dijo: —Simón, hijo de Juan, ¿me quieres? Pedro se puso muy triste de que tres veces le había preguntado si lo quería. Entonces le contestó: —Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: —Cuida de mis ovejas.

Ver Capítulo Copiar

40 Referencias Cruzadas  

Jesús le contestó: —¿En verdad estás dispuesto a morir por mí? Te aseguro que, antes de que el gallo cante, tres veces dirás que no me conoces.

En ese momento, el gallo cantó por segunda vez, y Pedro se acordó de lo que Jesús le había dicho: «Antes de que el gallo cante dos veces, tú habrás dicho tres veces que no me conoces.» Y Pedro se puso a llorar con mucha tristeza.

No necesitas esperar a que alguien te pregunte, porque tú lo sabes todo. Por eso creemos que Dios te ha enviado.

No hagan que se ponga triste el Espíritu Santo de Dios, que es como un sello de identidad que Dios puso en ustedes, para reconocerlos cuando llegue el día en que para siempre serán liberados del pecado.

Y Dios, que conoce nuestros pensamientos, ha demostrado que también ama a los que no son judíos, pues les ha dado el Espíritu Santo lo mismo que a nosotros.

Si obedecen todo lo que yo les he mandado, los amaré siempre, así como mi Padre me ama, porque yo lo obedezco en todo.

»Ustedes demostrarán que me aman, si cumplen mis mandamientos.

Tú sabes bien lo que pienso; has venido por las noches para ponerme a prueba y no me encontraste haciendo planes malvados; tampoco digo malas palabras, ni actúo con violencia, como lo hacen los demás. Yo solo a ti te obedezco; cumplo tus mandatos, y no me aparto de ellos.

Amados hermanos en Cristo, esta es la segunda carta que les escribo. En las dos he querido darles consejos, para que puedan pensar correctamente.

Por eso, aun cuando por algún tiempo tengan que pasar por muchos problemas y dificultades, ¡alégrense!

Nos satisface saber que nos hemos comportado bien, y que hemos sido sinceros con todos, especialmente con ustedes. No lo hicimos guiados por nuestra propia sabiduría, sino con la ayuda de Dios, y gracias a su gran amor.

Luego todos oraron: «Señor, tú sabes lo que nosotros pensamos y sentimos. Por eso, te rogamos que nos muestres cuál de estos dos

Pedro volvió a decir que no. En ese mismo momento, el gallo cantó.

»Yo, el Rey, les diré: “Lo que ustedes hicieron para ayudar a una de las personas menos importantes de este mundo, a quienes yo considero como hermanos, es como si lo hubieran hecho para mí.”

Solo yo, el Dios de Israel, sé muy bien lo que piensan, y los castigaré por su mala conducta.

Yo sé, Dios mío, que tú te das cuenta de nuestras intenciones y que te gusta que seamos sinceros. Por eso me da una gran alegría saber que tu pueblo y yo te hemos presentado nuestras ofrendas, de buena voluntad y con toda sinceridad.

Entonces la mujer le dijo a Elías: —Profeta, ¿qué tienes en mi contra? ¿Has venido a recordarme mis pecados y a castigarme con la muerte de mi hijo?

—¡Nuestro Dios es el más poderoso de todos los dioses! ¡Él sabe por qué hicimos esto, y queremos que ustedes lo sepan también! Si hemos levantado este altar por rebeldía, o para apartarnos de Dios, no nos perdonen la vida. Que Dios nos castigue si lo hemos construido para presentar nuestras ofrendas.

’Yo reprendo y corrijo a los que amo. Por eso, vuélvete a Dios y obedécelo completamente.

¿Qué más te puedo decir, Dios mío, si tú me conoces muy bien?

Cuando eras joven, te vestías e ibas a donde querías. Pero te aseguro que, cuando seas viejo, extenderás los brazos y otra persona te vestirá, y te llevará a donde no quieras ir.

¿Qué más te puedo decir Dios mío, por haberme honrado así, si tú me conoces muy bien?

Jesús le dijo: —Ve a llamar a tu esposo y regresa aquí con él.

»Esto ocurrió tres veces. Luego Dios retiró el manto y lo devolvió al cielo.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios