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Referencias Cruzadas

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Juan 13:34

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

»Les doy un mandamiento nuevo: Ámense unos a otros. »Ustedes deben amarse de la misma manera que yo los amo.

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38 Referencias Cruzadas  

Deben amar a los demás, así como Cristo nos amó y murió por nosotros. Para Dios, la muerte de Cristo es como el delicado aroma de una ofrenda.

Esto les ordeno: Que se amen unos a otros.

Ahora ustedes obedecen el verdadero mensaje de Dios, y Dios los ha limpiado de todo pecado para que se amen unos a otros sinceramente, como hermanos. Así que, ámense mucho unos a otros, con todo su corazón y con todas sus fuerzas.

Cuando tengan dificultades, ayúdense unos a otros. Esa es la manera de obedecer la ley de Cristo.

Y su mandamiento es que creamos en su Hijo Jesucristo, y que nos amemos unos a otros, tal como Jesús nos lo ordenó.

Y Jesucristo nos dio este mandamiento: «¡Amen a Dios, y ámense unos a otros!»

Si ustedes obedecen el mandamiento más importante que Dios nos ha dado, harán muy bien. Ese mandamiento dice: «Recuerden que cada uno debe amar a su prójimo como se ama a sí mismo.»

Le pedimos al Señor que los haga amarse más los unos a los otros, y amar también a todos por igual. Porque así los amamos nosotros a ustedes.

Ámense unos a otros como hermanos, y respétense siempre.

Ahora les pido que nos amemos los unos a los otros. Este mandamiento no es nuevo: es el mismo que se nos dio desde el principio.

Siempre que nos sea posible, hagamos el bien a todos, pero especialmente a los seguidores de Cristo.

Desde el principio se les ha enseñado a ustedes que nosotros debemos amarnos unos a otros.

Trátenlos como si fueran israelitas, y ámenlos como si fueran ustedes mismos, pues también ustedes fueron extranjeros en Egipto. Yo soy el Dios de Israel.

Ámense siempre los unos a los otros, como hermanos en Cristo.

Hermanos míos, en todo momento tenemos que dar gracias a Dios por ustedes. Y así debe ser, pues ustedes confían cada vez más en Dios, y se aman más y más los unos a los otros.

En cambio, el Espíritu de Dios nos hace amar a los demás, estar siempre alegres y vivir en paz con todos. Nos hace ser pacientes y amables, y tratar bien a los demás, tener confianza en Dios,

estimar a sus hermanos en Cristo y, sobre todo, amar a todos por igual.

pues hemos sabido que ustedes confían mucho en Cristo y aman a todos los que forman parte del pueblo de Dios.

Gracias a lo que Cristo hizo, ya no importa si estamos circuncidados o no. Lo que sí importa es que confiamos en Cristo, y que esa confianza nos hace amar a los demás.

Te pido que se mantengan unidos entre ellos, y que así como tú y yo estamos unidos, también ellos se mantengan unidos a nosotros. Así la gente de este mundo creerá que tú me enviaste.

Soy amigo de los que te adoran y de los que te obedecen.

La gente de mi pueblo, que solo a ti te adora, me hace sentir feliz.

Pero ahora yo les digo: Amen a sus enemigos y oren por quienes los maltratan.

No le deban nada a nadie. La única deuda que deben tener es la de amarse unos a otros. El que ama a los demás ya ha cumplido con todo lo que la ley exige.

El amor no causa daño a nadie. Cuando amamos a los demás, estamos cumpliendo toda la ley.




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