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Referencias Cruzadas

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Esdras 4:3

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

Pero Zorobabel, Josué y los otros jefes judíos contestaron: —No podemos aceptar la ayuda de ustedes. Solo nosotros podemos reconstruir el templo de nuestro Dios, porque así nos lo ordenó el rey Ciro de Persia.

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16 Referencias Cruzadas  

Yo les contesté: —Dios gobierna desde el cielo, y con su ayuda tendremos éxito. Ustedes no tienen autoridad en Jerusalén. Tampoco tienen ningún derecho, pues no son parte de su historia. Nosotros haremos los trabajos de reconstrucción.

Tú no tienes parte con nosotros, pues bien sabe Dios que tus intenciones no son buenas.

»El trabajo que yo los envío a hacer es peligroso. Es como enviar ovejas a un lugar lleno de lobos. Por eso, sean listos y estén atentos como las serpientes, pero sean también humildes, como las palomas.

Israel es mi pueblo elegido, y mi fiel servidor. Por amor a él, y aunque tú no me conocías, yo te llamé por tu nombre y te di el título de rey.

”Yo le digo a Ciro, el rey de Persia: ‘Tú eres como un pastor de ovejas, y harás lo que yo quiero.’ Yo le digo a Jerusalén: ‘Tú serás reconstruida.’ Y al templo le anuncio: ‘Serás reconstruido desde tus cimientos.’”»

En el primer año del gobierno de Ciro, rey de Persia, este rey dio la siguiente orden a todos los habitantes de su reino: «El Dios de los cielos, que es dueño de todo, me hizo rey de todas las naciones, y me encargó que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en la región de Judá. Por tanto, todos los que sean de Judá y quieran reconstruir el templo, tienen mi permiso para ir a Jerusalén. ¡Y que Dios los ayude!» Ciro, rey de Persia Con esta orden se cumplió la promesa que Dios había hecho por medio del profeta Jeremías.

Como los judíos no se llevaban bien con los de Samaria, la mujer le preguntó: —¡Pero si usted es judío! ¿Cómo es que me pide agua a mí, que soy samaritana?

En el primer año del gobierno de Ciro, rey de Persia, este rey dio la siguiente orden a todos los habitantes de su reino: «El Dios de los cielos, que es dueño de todo, me hizo rey de todas las naciones, y me encargó que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en la región de Judá. Por tanto, todos los que sean de Judá y quieran reconstruir el templo, tienen mi permiso para ir a Jerusalén. El Dios de Israel vive allí, y los ayudará. »Todos los que decidan ir a Jerusalén para trabajar en la reconstrucción, recibirán de sus vecinos ayuda en dinero, mercaderías y ganado. También recibirán donaciones para el templo de Dios». Ciro, rey de Persia Con esta orden se cumplió la promesa que Dios había hecho por medio del profeta Jeremías.

Zorobabel y el sacerdote Josué comenzaron la reconstrucción del templo de Dios un año y dos meses después de haber llegado a Jerusalén. Los ayudaron los sacerdotes, sus ayudantes y todos los judíos que habían regresado a Jerusalén. Y para dirigir los trabajos eligieron a hombres de la tribu de Leví mayores de veinte años.




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