Betsabé quedó embarazada, así que mandó a decirle a David que iba a tener un hijo suyo.
»Supongamos ahora que alguien llega a tener relaciones sexuales con la esposa de otro hombre. En tal caso, los dos deberán ser condenados a muerte. Así se acabará la maldad en Israel.
Además, el marido engañado da rienda suelta a su furia; si de vengarse se trata, no perdona a nadie.
»Si alguien tiene relaciones sexuales con la mujer de otro hombre, será condenado a muerte junto con la mujer.
Al oír esto, David le ordenó a Joab que le mandara a Urías el hitita, pues quería hablar con él. Joab así lo hizo,