1 Samuel 24:9

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

9 (10) y le dijo: —¿Por qué Su Majestad le hace caso a la gente que dice que quiero hacerle daño?

Referencias Cruzadas

Proverbios 29:12

El gobernante que presta atención a toda clase de mentiras, vivirá rodeado de ayudantes malvados.

Santiago 3:6

Las palabras que decimos con nuestra lengua son como el fuego. Nuestra lengua tiene mucho poder para hacer el mal. Puede echar a perder toda nuestra vida, y hacer que nos quememos en el infierno.

Proverbios 26:28

Quien miente, no se quiere a sí mismo; quien a todos alaba, se busca problemas.

Proverbios 25:23

El viento del norte hace llover, y las malas lenguas hacen enojar.

Proverbios 18:8

¡Qué sabrosos son los chismes, pero cuánto daño causan!

Proverbios 17:4

El mentiroso le cree al mentiroso y el malvado le cree al malvado.

Proverbios 16:28

El que es malvado y chismoso provoca peleas y causa divisiones.

Salmos 141:6

Cuando los gobernantes malvados acaben en la ruina, se acordarán de mis palabras y sabrán que les hablé con dulzura.

Salmos 101:5

Destruiré por completo al que hable mal de su amigo; no soportaré a mi lado al que se crea más importante y más inteligente que los demás.

1 Samuel 26:19

»Yo le suplico a mi señor y rey que me escuche. Si es Dios quien ha puesto a Su Majestad en mi contra, espero que él me perdone y acepte mi ofrenda; pero si es una cuestión de los hombres, que Dios los maldiga. Porque me están arrojando de esta tierra de Dios, y así me obligan a adorar a otros dioses.

Levítico 19:16

»No hagan chismes de nadie, pero digan la verdad si así pueden salvar la vida de otra persona. Yo soy el Dios de Israel.

1 Samuel 20:1

De Naiot, David se fue a donde estaba Jonatán, y le preguntó: —¿De qué maldad se me acusa? ¿En qué le he fallado a tu padre, para que quiera matarme?

1 Samuel 24:8

8 (9) Pero cuando ya se alejaba, David salió de la cueva y le gritó: —¡Mi señor y rey! Cuando Saúl miró hacia atrás, David se inclinó de cara al suelo,

1 Samuel 24:10

10 (11) Como usted mismo podrá ver, hoy Dios me dio la oportunidad de matarlo aquí mismo, en la cueva. Algunos de mis hombres me insistían que lo matara, pero yo no quise hacerlo. No quise hacerle ningún daño porque Su Majestad es mi rey. ¡Dios mismo lo eligió!

1 Samuel 26:18

¿Por qué me persigue usted? ¿Qué mal he cometido? ¿De qué se me acusa?

Jeremías 37:18

Además, quiero hacerle a usted algunas preguntas personales: ¿Qué crimen he cometido contra Su Majestad? ¿Qué mal le he hecho a usted, o a sus ministros o a este pueblo? Yo no merezco estar en la cárcel.

1 Samuel 20:41

Cuando el muchacho se fue, David salió de su escondite y, de cara al suelo en señal de respeto, se inclinó tres veces delante de Jonatán. Luego se abrazaron y lloraron mucho, aunque David lloraba más.