Algunos días después, Samuel reunió a todo el pueblo en Mispá, y en presencia de Dios
Después de meditarlo bien, los israelitas de todo el país se reunieron en Mispá, porque allí estaba el santuario de Dios; fueron del norte y del sur, del este y del oeste.
Así que Jefté se fue con ellos, y el pueblo lo nombró jefe y gobernador. En Mispá, Jefté puso a Dios por testigo del trato que hicieron.
Tanto me hiciste enojar que te di el rey que pediste, pero tanto me has hecho enojar que ahora te lo he quitado;