Que el Dios de la esperanza os llene de toda alegría y paz a vosotros que creéis en él, para que reboséis de esperanza por el poder del Espíritu Santo.
pues aunque el ejercicio físico trae algún provecho, la piedad es útil para todo, ya que incluye una promesa no solo para la vida presente, sino también para la venidera.
Así, mientras existan los cielos sobre la tierra, vosotros y vuestros descendientes prolongaréis vuestra vida sobre la tierra que el Señor juró a vuestros antepasados que les daría.