Entonces Balac le dijo: ―Por favor, ven conmigo a otro lugar. Desde allí podrás ver solo a una parte del pueblo, y no a todos ellos, y les desearás el mal.
En su lugar, Jeroboán había nombrado sacerdotes para los santuarios paganos y para el culto a los machos cabríos y a los becerros que había mandado hacer.
Destruiréis por completo todos los lugares donde adoran a sus dioses las naciones que vosotros vais a desposeer, es decir, en las montañas, en las colinas y debajo de todo árbol frondoso.
Han construido santuarios paganos en honor de Baal, para quemar a sus hijos en el fuego como holocaustos a Baal, cosa que yo jamás les ordené ni mencioné, ni jamás me pasó por la mente.