Un sábado, al pasar Jesús por los sembrados, sus discípulos se pusieron a arrancar unas espigas de trigo, y las desgranaban para comérselas.
»Si entras en el trigal de tu prójimo, podrás arrancar espigas con las manos, pero no cortar el trigo con la hoz.
El primer día celebraréis una fiesta solemne en su honor; ese día no haréis ningún trabajo.
Durante siete días comeréis pan sin levadura, de modo que debéis retirar de vuestras casas la levadura el primer día. Todo el que coma algo con levadura desde el día primero hasta el séptimo será eliminado de Israel.
»Contarás siete semanas a partir del día en que comience la cosecha del trigo.
»A partir del día siguiente al sábado, es decir, a partir del día en que traigáis la gavilla de la ofrenda mecida, contaréis siete semanas completas.
Y nadie que haya bebido vino añejo quiere el nuevo, porque dice: “El añejo es mejor”.
Otro sábado entró en la sinagoga y comenzó a enseñar. Había allí un hombre que tenía la mano derecha paralizada;