Los de la tribu de Efraín le dijeron a Gedeón: ―¿Por qué nos has tratado así? ¿Por qué no nos llamaste cuando fuiste a luchar contra los madianitas? Y se lo reprocharon severamente.
Por eso los israelitas fueron a ver al rey y le preguntaron: ―¿Cómo es que nuestros hermanos de Judá se han adueñado del rey al cruzar el Jordán, y lo han escoltado a él, a su familia y a todas sus tropas?
―¿Qué hice yo, comparado con lo que hicisteis vosotros? —replicó él—. ¿No valen más los rebuscos de las uvas de Efraín que toda la vendimia de Abiezer?
Los de Judá respondieron: ―¿Y a qué viene ese enojo? ¡El rey es nuestro pariente cercano! ¿Acaso hemos vivido a costa del rey? ¿Acaso nos hemos aprovechado de algo?