vosotros, por vuestra parte, no haréis ningún pacto con la gente de esta tierra, sino que derribaréis sus altares”. ¡Pero me habéis desobedecido! ¿Por qué habéis actuado así?
Así dice el Señor: «¿Qué injusticia vieron en mí vuestros antepasados, que se alejaron tanto de mí? Se fueron tras lo que nada vale, y en nada se convirtieron.
Por eso el Señor se enfureció contra Israel y dijo: «Puesto que esta nación ha violado el pacto que yo establecí con sus antepasados y no me ha obedecido,
Destruye a todos los pueblos que el Señor tu Dios entregue en tus manos. No te apiades de ellos ni sirvas a sus dioses, para que no te sean una trampa mortal.
Porque es tiempo de que el juicio comience por la familia de Dios; y, si comienza por nosotros, ¡cuál no será el fin de los que se rebelan contra el evangelio de Dios!
Con el oro, Gedeón hizo un efod, que puso en Ofra, su ciudad. Todo Israel se prostituyó al adorar allí el efod, el cual se convirtió en una trampa para Gedeón y su familia.