Juan 1:51

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

―Ciertamente os aseguro que veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.

Referencias Cruzadas

Génesis 28:12

Allí soñó que había una escalinata apoyada en la tierra, cuyo extremo superior llegaba hasta el cielo. Por ella subían y bajaban los ángeles de Dios.

Hechos 7:56

―¡Veo el cielo abierto —exclamó—, y al Hijo del hombre de pie a la derecha de Dios!

Lucas 22:43

Entonces se le apareció un ángel del cielo para fortalecerlo.

Lucas 2:13

De repente apareció una multitud de ángeles del cielo, que alababan a Dios y decían:

Marcos 14:62

―Sí, yo soy —dijo Jesús—. Y veréis al Hijo del hombre sentado a la derecha del Todopoderoso, y viniendo en las nubes del cielo.

Marcos 1:10

En seguida, al subir del agua, Jesús vio que el cielo se abría y que el Espíritu bajaba sobre él como una paloma.

Mateo 3:16

Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él.

Ezequiel 1:1

En el día quinto del mes cuarto del año treinta, mientras me encontraba entre los deportados a orillas del río Quebar, los cielos se abrieron y recibí visiones de Dios.

Hechos 10:11

Vio el cielo abierto y algo parecido a una gran sábana que, suspendida por las cuatro puntas, descendía hacia la tierra.

Lucas 3:21

Sucedió que, cuando todos acudían a Juan para que los bautizara, Jesús fue bautizado también. Y, mientras oraba, se abrió el cielo,

Mateo 4:11

Entonces el diablo lo dejó, y unos ángeles acudieron a servirle.

Apocalipsis 19:11

Luego vi el cielo abierto, y apareció un caballo blanco. Su jinete se llama Fiel y Verdadero. Con justicia dicta sentencia y hace la guerra.

Apocalipsis 4:1

Después de esto miré, y allí en el cielo había una puerta abierta. Y la voz que me había hablado antes con sonido como de trompeta me dijo: «Sube aquí: voy a mostrarte lo que tiene que suceder después de esto».

2 Tesalonicenses 1:7

Y a vosotros que sufrís, os dará descanso, lo mismo que a nosotros. Esto sucederá cuando el Señor Jesús se manifieste desde el cielo entre llamas de fuego, con sus poderosos ángeles,

Lucas 2:9

Sucedió que un ángel del Señor se les apareció. La gloria del Señor los envolvió en su luz, y se llenaron de temor.

Hebreos 1:14

¿No son todos los ángeles espíritus dedicados al servicio divino, enviados para ayudar a los que han de heredar la salvación?

1 Timoteo 3:16

No hay duda de que es grande el misterio de nuestra fe: Él se manifestó como hombre; fue vindicado por el Espíritu, visto por los ángeles, proclamado entre las naciones, creído en el mundo, recibido en la gloria.

Juan 10:1

»Ciertamente os aseguro que el que no entra por la puerta al redil de las ovejas, sino que trepa y se mete por otro lado, es un ladrón y un bandido.

Lucas 22:69

Pero de ahora en adelante el Hijo del hombre estará sentado a la derecha del Dios Todopoderoso.

Mateo 25:31

»Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, con todos sus ángeles, se sentará en su trono glorioso.

Judas 1:14

También Enoc, el séptimo patriarca a partir de Adán, profetizó acerca de ellos: «Mirad, el Señor viene con millares y millares de sus ángeles

2 Tesalonicenses 1:9

Ellos sufrirán el castigo de la destrucción eterna, lejos de la presencia del Señor y de la majestad de su poder,

Juan 14:12

Ciertamente os aseguro que el que cree en mí las obras que yo hago también él las hará, y aun las hará mayores, porque yo vuelvo al Padre.

Juan 6:47

Ciertamente os aseguro que el que cree tiene vida eterna.

Lucas 24:4

Mientras se preguntaban qué habría pasado, se les presentaron dos hombres con ropas resplandecientes.

Mateo 26:24

A la verdad, el Hijo del hombre se irá, tal como está escrito de él, pero ¡ay de aquel que lo traiciona! Más le valdría a ese hombre no haber nacido.

Juan 21:18

De veras te aseguro que cuando eras más joven te vestías tú mismo e ibas adonde querías; pero, cuando seas viejo, extenderás las manos y otro te vestirá y te llevará adonde no quieras ir.

Juan 8:51

Ciertamente os aseguro que el que cumple mi palabra nunca morirá.

Juan 6:32

―Ciertamente os aseguro que no fue Moisés el que os dio el pan del cielo —afirmó Jesús—. El que da el verdadero pan del cielo es mi Padre.

Juan 3:5

―Yo te aseguro que quien no nazca de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios —respondió Jesús—.

Juan 16:20

Ciertamente os aseguro que lloraréis de dolor, mientras que el mundo se alegrará. Os pondréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en alegría.

Juan 13:16

Ciertamente os aseguro que ningún siervo es más que su amo, y ningún mensajero es más que el que lo envió.

Juan 10:7

Por eso volvió a decirles: «Ciertamente os aseguro que yo soy la puerta de las ovejas.

Juan 6:53

―Ciertamente os aseguro —afirmó Jesús— que, si no coméis la carne del Hijo del hombre ni bebéis su sangre, no tenéis realmente vida.

Juan 5:27

y le ha dado autoridad para juzgar, puesto que es el Hijo del hombre.

Juan 5:19

Entonces Jesús afirmó: ―Ciertamente os aseguro que el Hijo no puede hacer nada por su propia cuenta, sino solamente lo que ve que su Padre hace, porque cualquier cosa que hace el Padre, la hace también el Hijo.

Juan 3:3

―De veras te aseguro que quien no nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios —dijo Jesús.

Mateo 9:6

Pues para que sepáis que el Hijo del hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados —se dirigió entonces al paralítico—: Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.

Mateo 8:20

―Las zorras tienen madrigueras y las aves tienen nidos —le respondió Jesús—, pero el Hijo del hombre no tiene dónde recostar la cabeza.

Zacarías 13:7

»¡Despierta, espada, contra mi pastor, contra el hombre en quien confío! —afirma el Señor Todopoderoso—. Hiere al pastor para que se dispersen las ovejas y vuelva yo mi mano contra los corderitos.

Juan 16:23

En aquel día ya no me preguntaréis nada. Ciertamente os aseguro que mi Padre os dará todo lo que le pidáis en mi nombre.

Juan 13:38

―¿Darás tú la vida por mí? ¡De veras te aseguro que, antes de que cante el gallo, me negarás tres veces!

Juan 8:58

―Ciertamente os aseguro que, antes de que Abraham naciera, ¡yo soy!

Juan 8:34

―Ciertamente os aseguro que todo el que peca es esclavo del pecado —respondió Jesús—.

Juan 6:26

―Ciertamente os aseguro que me buscáis no porque habéis visto señales, sino porque comisteis pan hasta llenaros.

Juan 1:50

―¿Lo crees porque te dije que te vi cuando estabas debajo de la higuera? ¡Vas a ver aun cosas más grandes que estas! Y añadió: