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Referencias Cruzadas

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Juan 1:17

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

pues la ley fue dada por medio de Moisés, mientras que la gracia y la verdad nos han llegado por medio de Jesucristo.

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37 Referencias Cruzadas  

Así el pecado no tendrá dominio sobre vosotros, porque ya no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.

―Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí.

Y el Verbo se hizo hombre y habitó entre nosotros. Y hemos contemplado su gloria, la gloria que corresponde al Hijo unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.

De hecho, la ley exige que casi todo sea purificado con sangre, pues sin derramamiento de sangre no hay perdón.

y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.

¿No os ha dado Moisés la ley a vosotros? Sin embargo, ninguno de vosotros la cumple. ¿Por qué tratáis entonces de matarme?

Señalaron un día para reunirse con Pablo, y acudieron en mayor número a la casa donde estaba alojado. Desde la mañana hasta la tarde estuvo explicándoles y testificándoles acerca del reino de Dios y tratando de convencerlos respecto a Jesús, partiendo de la ley de Moisés y de los profetas.

Puesto que me has obedecido, todas las naciones del mundo serán bendecidas por medio de tu descendencia.

Lo que quiero decir es esto: La ley, que vino cuatrocientos treinta años después, no anula el pacto que Dios había ratificado previamente; de haber sido así, quedaría sin efecto la promesa.

Moisés convocó a todo Israel y dijo: «Escuchad, israelitas, los preceptos y las normas que yo os comunico hoy. Aprendéoslos y procurad ponerlos en práctica.

Este mismo Moisés estuvo en la asamblea en el desierto, con el ángel que le habló en el monte Sinaí, y con nuestros antepasados. Fue también él quien recibió palabras de vida para comunicárnoslas a nosotros.

»Pero no penséis que yo voy a acusaros delante del Padre. Quien os va a acusar es Moisés, en quien tenéis puesta vuestra esperanza.

Pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y la de ella; su simiente te aplastará la cabeza, pero tú le morderás el talón».

Todas las promesas que ha hecho Dios son «sí» en Cristo. Así que por medio de Cristo respondemos «Amén» para la gloria de Dios.

Y sabemos que a Moisés le habló Dios; pero de este no sabemos ni de dónde salió.

Muestra tu fidelidad a Jacob, y tu lealtad a Abraham, como desde tiempos antiguos se lo juraste a nuestros antepasados.

Se ha acordado de su amor y de su fidelidad por el pueblo de Israel; ¡todos los confines de la tierra son testigos de la salvación de nuestro Dios!

El amor y la verdad se encontrarán; se besarán la paz y la justicia.

Es la ley que nos dio Moisés, el tesoro de la asamblea de Jacob.

Esta es la ley que Moisés expuso a los israelitas.

―¡Así que eres rey! —le dijo Pilato. ―Eres tú quien dice que soy rey. Yo para esto nací, y para esto vine al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo el que está de parte de la verdad escucha mi voz.




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