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Referencias Cruzadas

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Jeremías 6:11

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Pero yo estoy lleno de la ira del Señor, y ya no puedo contenerme. «Derrama tu ira sobre los niños de la calle, sobre los grupos de jóvenes, porque serán apresados el marido y la mujer, la gente madura y la entrada en años.

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22 Referencias Cruzadas  

Si digo: «No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre», entonces su palabra en mi interior se vuelve un fuego ardiente que me cala hasta los huesos. He hecho todo lo posible por contenerla, pero ya no puedo más.

«La muerte se ha metido por nuestras ventanas, ha entrado en nuestros palacios; ha eliminado en las calles a los niños, y en las plazas a los jóvenes.

Yo, en cambio, estoy lleno de poder, lleno del Espíritu del Señor, y lleno de justicia y de fuerza, para echarle en cara a Jacob su delito; para reprocharle a Israel su pecado.

Oí una voz que desde el templo decía a gritos a los siete ángeles: «¡Id y derramad sobre la tierra las siete copas del furor de Dios!»

Cuando Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, Pablo se dedicó exclusivamente a la predicación, testificando a los judíos que Jesús era el Mesías.

Mientras Pablo los esperaba en Atenas, le dolió en el alma ver que la ciudad estaba llena de ídolos.

Nosotros no podemos dejar de hablar de lo que hemos visto y oído.

Os digo que en aquella noche estarán dos personas en una misma cama: una será llevada y la otra será dejada.

Matad a viejos y a jóvenes, a muchachas, niños y mujeres; comenzad en el templo, y no dejéis a nadie con vida. Pero no toquéis a los que tengan la señal». Y aquellos hombres comenzaron a matar a los viejos que estaban frente al templo.

El Espíritu me levantó y se apoderó de mí, y me fui amargado y enardecido, mientras la mano del Señor me sujetaba con fuerza.

Por eso, entrega ahora a sus hijos al hambre; abandónalos a merced de la espada. Que sus esposas se queden viudas y sin hijos; que sus maridos mueran asesinados, y que sus jóvenes caigan en combate a filo de espada.

»Por eso, así dice el Señor omnipotente: “Descargaré mi enojo y mi furor sobre este lugar: sobre los hombres y los animales, sobre los árboles del campo y los frutos de la tierra, ¡y arderá mi enojo y no se apagará!”

Aun los jóvenes se cansan, se fatigan, y los muchachos tropiezan y caen;

Tú me has rechazado, te has vuelto atrás —afirma el Señor—. Extenderé mi mano contra ti, y te destruiré; estoy cansado de tener compasión de ti.

No he formado parte de grupos libertinos, ni me he divertido con ellos; he vivido solo, porque tú estás conmigo y me has llenado de indignación.

»En mi ciudad, el Señor ha rechazado a todos los guerreros; ha reunido un ejército para atacarme, para despedazar a mis jóvenes. El Señor ha aplastado a la virginal hija de Judá como quien pisa uvas para hacer vino.

»Jóvenes y ancianos por igual yacen en el polvo de las calles; mis jóvenes y mis doncellas cayeron a filo de espada. En tu enojo les quitaste la vida; ¡los masacraste sin piedad!

Luego me dijo: «Hijo de hombre, cómete el rollo que te estoy dando hasta que te sacies». Y yo me lo comí, y era tan dulce como la miel.

advertirle al pueblo de Israel que así dice el Señor omnipotente: “Voy a profanar mi santuario, orgullo de vuestra fortaleza, el templo que os deleita la vista y en el que depositáis vuestro afecto. Los hijos y las hijas que dejasteis morirán a filo de espada,

¿Y no los he de castigar por esto? —afirma el Señor—. ¿Acaso no he de vengarme de semejante nación?

Escuchad, mujeres, la palabra del Señor; reciban vuestros oídos la palabra de su boca. Enseñad a vuestras hijas a entonar endechas; que unas a otras se enseñen este lamento:




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