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Referencias Cruzadas

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Jeremías 3:23

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Ciertamente son un engaño las colinas, y una mentira el estruendo sobre las montañas. Ciertamente en el Señor nuestro Dios está la salvación de Israel.

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25 Referencias Cruzadas  

Tuya es, Señor, la salvación; ¡envía tu bendición sobre tu pueblo! Selah

¡Dios es mi salvación! Confiaré en él y no temeré. El Señor es mi fuerza, el Señor es mi canción; ¡él es mi salvación!»

Vosotros adoráis lo que no conocéis; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación proviene de los judíos.

En cambio, tendré compasión de la tribu de Judá, y la salvaré; pero no por medio de arco, ni de espada ni de batallas, ni tampoco por medio de caballos y jinetes, sino por medio del Señor su Dios».

Cuando los hice entrar en la tierra que con la mano en alto había jurado darles, cualquier cerro o árbol frondoso que veían les venía bien para hacer sacrificios y presentarme esas ofrendas que tanto me ofenden. Allí quemaban incienso y derramaban sus libaciones.

Sáname, Señor, y seré sanado; sálvame y seré salvado, porque tú eres mi alabanza.

Tú, esperanza y salvación de Israel en momentos de angustia, ¿por qué actúas en el país como un peregrino, como un viajero que solo pasa la noche?

Durante el reinado del rey Josías el Señor me dijo: «¿Has visto lo que ha hecho Israel, la infiel? Se fue a todo monte alto, y allí, bajo todo árbol frondoso, se prostituyó.

Pero tú eres nuestro Padre, aunque Abraham no nos conozca ni nos reconozca Israel; tú, Señor, eres nuestro Padre; ¡tu nombre ha sido siempre «nuestro Redentor»!

¿Quién es este que viene de Edom, desde Bosra, vestido de púrpura? ¿Quién es este de espléndido ropaje, que avanza con fuerza arrolladora? «Soy yo, el que habla con justicia, el que tiene poder para salvar».

»Reuníos, fugitivos de las naciones; congregaos y venid. Ignorantes son los que cargan ídolos de madera y oran a dioses que no pueden salvar.

Pero Israel será salvado por el Señor con salvación eterna; y nunca más volverá a ser avergonzado ni humillado.

Tú, Dios y Salvador de Israel, eres un Dios que se oculta.

Los que fabrican ídolos no valen nada; inútiles son sus obras más preciadas. Para su propia vergüenza, sus propios testigos no ven ni conocen.

Yo, yo soy el Señor, fuera de mí no hay ningún otro salvador.

Dios es mi salvación y mi gloria; es la roca que me fortalece; ¡mi refugio está en Dios!

Se prepara al caballo para el día de la batalla, pero la victoria depende del Señor.

Bien que se acuerdan sus hijos de sus altares junto a árboles frondosos; de sus imágenes de Aserá sobre altas colinas

Así dice el Señor: «Cantad jubilosos en honor de Jacob; gritad de alegría por la mejor de las naciones. Haced oír vuestras alabanzas y clamad: “Salva, Señor, a tu pueblo; salva al remanente de Israel”.

En aquel día ni el remanente de Israel ni los sobrevivientes del pueblo de Jacob volverán a apoyarse en quien los hirió de muerte, sino que su apoyo verdadero será el Señor, el Santo de Israel.




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