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Referencias Cruzadas

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Jeremías 24:5

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

«Así dice el Señor, el Dios de Israel: “A los deportados de Judá, que envié de este lugar al país de los babilonios, los consideraré como a estos higos buenos.

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21 Referencias Cruzadas  

Pero a esa parte restante la pasaré por el fuego; la refinaré como se refina la plata, la probaré como se prueba el oro. Entonces ellos me invocarán y yo les responderé. Yo diré: “Ellos son mi pueblo”, y ellos dirán: “El Señor es nuestro Dios”.

Bueno es el Señor; es refugio en el día de la angustia, y protector de los que en él confían.

Yo reprendo y disciplino a todos los que amo. Por lo tanto, sé fervoroso y arrepiéntete.

A pesar de todo, el fundamento de Dios es sólido y se mantiene firme, pues está sellado con esta inscripción: «El Señor conoce a los suyos», y esta otra: «Que se aparte de la maldad todo el que invoca el nombre del Señor».

Pero, ahora que conocéis a Dios —o más bien que Dios os conoce a vosotros—, ¿cómo es que queréis regresar a esos principios ineficaces y sin valor? ¿Queréis volver a ser esclavos de ellos?

Pero el que ama a Dios es conocido por él.

Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito.

Mis ovejas oyen mi voz; yo las conozco y ellas me siguen.

“¡No, no os conozco!”, respondió él.

Me hizo bien haber sido afligido, porque así llegué a conocer tus decretos.

Antes de sufrir anduve descarriado, pero ahora obedezco tu palabra.

en el desierto te alimentó con maná, comida que jamás conocieron tus antepasados. Así te humilló y te puso a prueba, para que a fin de cuentas te fuera bien.

Y la palabra del Señor vino a mí:

Así dice el Señor Todopoderoso, el Dios de Israel, a todos los que he deportado de Jerusalén a Babilonia:

»Pero ahora todos vosotros los exiliados que hice deportar de Jerusalén a Babilonia, ¡obedeced mi palabra!»

»Adviérteles también que así dice el Señor omnipotente: “Yo os reuniré de entre las naciones; os juntaré de los países donde habéis estado dispersos, y os daré la tierra de Israel.

»A pesar de todo, y aunque estén en la tierra de sus enemigos, no los rechazaré ni los aborreceré hasta el punto de exterminarlos, ni romperé tampoco mi pacto con ellos. Yo soy el Señor su Dios.

Porque yo sé muy bien los planes que tengo para vosotros —afirma el Señor—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de daros un futuro y una esperanza.

para que cumplan mis decretos y pongan en práctica mis leyes. Entonces ellos serán mi pueblo, y yo seré su Dios.




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