Cuando los seres humanos comenzaron a multiplicarse sobre la tierra y tuvieron hijas,
y los bendijo con estas palabras: «Sed fructíferos y multiplicaos; llenad la tierra y sometedla; dominad a los peces del mar y a las aves del cielo, y a todos los reptiles que se arrastran por el suelo».
Noé ya había cumplido quinientos años cuando fue padre de Sem, Cam y Jafet.
los hijos de Dios vieron que las hijas de los seres humanos eran hermosas. Entonces tomaron como mujeres a todas las que desearon.