Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Génesis 31:3

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Entonces el Señor le dijo a Jacob: «Vuélvete a la tierra de tus padres, donde están tus parientes, que yo estaré contigo».

Ver Capítulo Copiar

26 Referencias Cruzadas  

Yo estoy contigo. Te protegeré por dondequiera que vayas, y te traeré de vuelta a esta tierra. No te abandonaré hasta cumplir con todo lo que te he prometido».

Entonces Jacob se puso a orar: «Señor, Dios de mi abuelo Abraham y de mi padre Isaac, que me dijiste que regresara a mi tierra y a mis familiares, y que me harías prosperar:

Manteneos libres del amor al dinero, y contentaos con lo que tenéis, porque Dios ha dicho: «Nunca te dejaré; jamás te abandonaré».

Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa.

Invócame en el día de la angustia; yo te libraré y tú me honrarás».

Yo soy el Dios de Betel, donde ungiste una estela y me hiciste una promesa. Vete ahora de esta tierra, y vuelve a la tierra de tu origen”».

En aquel tiempo, Abimélec, que estaba acompañado por Ficol, jefe de su ejército, le dijo a Abraham: ―Dios está contigo en todo lo que haces.

Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia.

Dios le dijo a Jacob: «Ponte en marcha, y vete a vivir a Betel. Erige allí un altar al Dios que se te apareció cuando escapabas de tu hermano Esaú».

puso en marcha todo su ganado, junto con todos los bienes que había acumulado en Padán Aram, y se dirigió hacia la tierra de Canaán, donde vivía su padre Isaac.

Después de que Raquel dio a luz a José, Jacob le dijo a Labán: ―Déjame regresar a mi hogar y a mi propia tierra.

En el sueño, el Señor estaba de pie junto a él y le decía: «Yo soy el Señor, el Dios de tu abuelo Abraham y de tu padre Isaac. A ti y a tu descendencia os daré la tierra sobre la que estás acostado.

Que también te dé, a ti y a tu descendencia, la bendición de Abraham, para que puedas poseer esta tierra donde ahora vives como extranjero, esta tierra que Dios le prometió a Abraham.

Esa noche se le apareció el Señor, y le dijo: «Yo soy el Dios de tu padre Abraham. No temas, porque yo estoy contigo. Por amor a mi siervo Abraham, te bendeciré y multiplicaré tu descendencia».

Yo te daré a ti y a tu descendencia, para siempre, toda la tierra que abarca tu mirada.

Días y años nos has afligido, nos has hecho sufrir; ¡devuélvenos ahora ese tiempo en alegría!

Tiempo después, José dijo a sus hermanos: «Yo estoy a punto de morir, pero sin duda Dios vendrá a ayudaros, y os llevará de este país a la tierra que prometió a Abraham, Isaac y Jacob».

También notó que Labán ya no lo trataba como antes.

Jacob mandó llamar a Raquel y a Lea al campo donde estaba el rebaño,

Vámonos a Betel. Allí construiré un altar al Dios que me socorrió cuando estaba yo en peligro, y que me ha acompañado en mi camino».

―Yo estaré contigo —le respondió Dios—. Y te voy a dar una señal de que soy yo quien te envía: Cuando hayas sacado de Egipto a mi pueblo, todos vosotros me rendiréis culto en esta montaña.

y que ahora tiene vacas, asnos, ovejas, esclavos y esclavas. Te manda este mensaje, con la esperanza de ganarse tu favor».

realmente yo, tu siervo, no soy digno de la bondad y fidelidad con que me has privilegiado. Cuando crucé este río Jordán, no tenía más que mi bastón; pero ahora he llegado a formar dos campamentos.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios