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Referencias Cruzadas

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Génesis 3:19

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres, y al polvo volverás».

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33 Referencias Cruzadas  

Volverá entonces el polvo a la tierra, como antes fue, y el espíritu volverá a Dios, que es quien lo dio.

todo el género humano perecería, ¡la humanidad entera volvería a ser polvo!

Si escondes tu rostro, se aterran; si les quitas el aliento, mueren y vuelven al polvo.

Y Dios el Señor formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz hálito de vida, y el hombre se convirtió en un ser viviente.

Tú haces que los hombres vuelvan al polvo, cuando dices: «¡Volveos al polvo, mortales!»

El que robaba, que no robe más, sino que trabaje honradamente con las manos para tener qué compartir con los necesitados.

y todo va hacia el mismo lugar. »Todo surgió del polvo, y al polvo todo volverá.

Abraham le dijo: ―Reconozco que he sido muy atrevido al dirigirme a mi Señor, yo, que apenas soy polvo y ceniza.

y del polvo de la tierra se levantarán las multitudes de los que duermen, algunos de ellos para vivir por siempre, pero otros para quedar en la vergüenza y en la confusión perpetuas.

¿Qué provecho saca el hombre de tanto afanarse en esta vida?

Se ha secado mi vigor como una teja; la lengua se me pega al paladar. ¡Me has hundido en el polvo de la muerte!

―Entre vosotros yo soy un extranjero; no obstante, quiero pediros que me vendáis un sepulcro para enterrar a mi esposa.

Porque, incluso cuando estábamos con vosotros, os ordenamos: «El que no quiera trabajar, que tampoco coma».

Él conoce nuestra condición; sabe que somos de barro.

Recordaréis, hermanos, nuestros esfuerzos y fatigas para proclamaros el evangelio de Dios, y cómo trabajamos día y noche para no seros una carga.

Tal como salió del vientre de su madre, así se irá: desnudo como vino al mundo, y sin llevarse el fruto de tanto trabajo.

Y me dediqué de lleno a explorar e investigar con sabiduría todo cuanto se hace bajo el cielo. ¡Penosa tarea ha impuesto Dios al género humano para abrumarlo con ella!

Quien se aparta de la senda del discernimiento irá a parar entre los muertos.

Festejarán y adorarán todos los ricos de la tierra; ante él se postrarán todos los que bajan al polvo, los que no pueden conservar su vida.

¡En el polvo yacen unos y otros, todos ellos cubiertos de gusanos!

Y, cuando mi piel haya sido destruida, todavía veré a Dios con mis propios ojos.

Entonces dijo: «Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo he de partir. El Señor ha dado; el Señor ha quitado. ¡Bendito sea el nombre del Señor!»

El primer hombre era del polvo de la tierra; el segundo hombre, del cielo.

Y así como está establecido que los seres humanos mueran una sola vez, y después venga el juicio,

La tierra te producirá cardos y espinas, y comerás hierbas silvestres.

¡cuánto más a los que habitan en casas de barro cimentadas sobre el polvo y expuestos a ser aplastados como polilla!

Sale entonces la gente a cumplir sus tareas, a hacer su trabajo hasta el anochecer.

En vano madrugáis, y os acostáis muy tarde, para comer un pan de fatigas, porque Dios concede el sueño a sus amados.

De modo que Adán murió a los novecientos treinta años de edad.

Recuerda que tú me modelaste, como al barro; ¿vas ahora a devolverme al polvo?




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