Génesis 21:10

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Por eso le dijo a Abraham: ―¡Echa de aquí a esa esclava y a su hijo! El hijo de esa esclava jamás tendrá parte en la herencia con mi hijo Isaac.

Referencias Cruzadas

Juan 8:35

Ahora bien, el esclavo no se queda para siempre en la familia; pero el hijo sí se queda en ella para siempre.

1 Juan 2:19

Aunque salieron de entre nosotros, en realidad no eran de los nuestros; si lo hubieran sido, se habrían quedado con nosotros. Su salida sirvió para comprobar que ninguno de ellos era de los nuestros.

1 Pedro 1:4

y recibamos una herencia indestructible, incontaminada e inmarchitable. Tal herencia está reservada en el cielo para vosotros,

Gálatas 4:7

Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y, como eres hijo, Dios te ha hecho también heredero.

Gálatas 3:18

Si la herencia se basa en la ley, ya no se basa en la promesa; pero Dios se la concedió gratuitamente a Abraham mediante una promesa.

Mateo 22:13

Entonces el rey dijo a los sirvientes: “Atadlo de pies y manos, y echadlo afuera, a la oscuridad, donde habrá llanto y rechinar de dientes”.

Génesis 25:19

Esta es la historia de Isaac, el hijo que tuvo Abraham.

Génesis 25:6

A los hijos de sus concubinas les hizo regalos y, mientras él todavía estaba con vida, los separó de su hijo Isaac, enviándolos a las regiones orientales.

Génesis 22:10

Entonces tomó el cuchillo para sacrificar a su hijo,

Génesis 20:11

Abraham contestó: ―Yo pensé que en este lugar no había temor de Dios, y que por causa de mi esposa me matarían.

Génesis 17:21

Pero mi pacto lo estableceré con Isaac, el hijo que te dará Sara de aquí a un año, por estos días.

Génesis 17:19

A lo que Dios contestó: ―¡Pero es Sara, tu esposa, la que te dará un hijo, al que llamarás Isaac! Yo estableceré mi pacto con él y con sus descendientes, como pacto perpetuo.

Proverbios 22:10

Despide al insolente, y se irá la discordia, y cesarán los pleitos y los insultos.

Jueces 11:2

Galaad también tuvo hijos con su esposa, quienes cuando crecieron echaron a Jefté. «No tendrás parte en la herencia de nuestra familia —le dijeron—, porque eres hijo de otra mujer».