Cuando Serug tenía treinta años, nació su hijo Najor.
Josué se dirigió a todo el pueblo, y le exhortó: ―Así dice el Señor, Dios de Israel: “Hace mucho tiempo, vuestros antepasados, Téraj y sus hijos Abraham y Najor, vivían al otro lado del río Éufrates, y adoraban a otros dioses.
Después del nacimiento de Serug, Reú vivió doscientos siete años más, y tuvo otros hijos y otras hijas.
Después del nacimiento de Najor, Serug vivió doscientos años más, y tuvo otros hijos y otras hijas.