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Referencias Cruzadas

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Génesis 1:1

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Dios, en el principio, creó los cielos y la tierra.

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67 Referencias Cruzadas  

Por la fe entendemos que el universo fue formado por la palabra de Dios, de modo que lo visible no provino de lo que se ve.

Porque así dice el Señor, el que creó los cielos; el Dios que formó la tierra, que la hizo y la estableció; que no la creó para dejarla vacía, sino que la formó para ser habitada: «Yo soy el Señor, y no hay ningún otro.

«Digno eres, Señor y Dios nuestro, de recibir la gloria, la honra y el poder, porque tú creaste todas las cosas; por tu voluntad existen y fueron creadas».

También dice: «En el principio, oh Señor, tú afirmaste la tierra, y los cielos son la obra de tus manos.

Así dice Dios, el Señor, el que creó y desplegó los cielos; el que extendió la tierra y todo lo que ella produce; el que da aliento al pueblo que la habita, y vida a los que en ella se mueven:

Acuérdate de que en seis días hizo el Señor los cielos y la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos, y que descansó el séptimo día. Por eso el Señor bendijo y consagró el día de reposo.

»¿Dónde estabas cuando puse las bases de la tierra? ¡Dímelo, si de veras sabes tanto!

»El Dios que hizo el mundo y todo lo que hay en él es Señor del cielo y de la tierra. No vive en templos construidos por hombres,

Pero intencionadamente olvidan que desde tiempos antiguos, por la palabra de Dios, existía el cielo y también la tierra, que surgió del agua y mediante el agua.

»¡Solo tú eres el Señor! Tú has hecho los cielos, y los cielos de los cielos con todas sus estrellas. Tú le das vida a todo lo creado: la tierra y el mar con todo lo que hay en ellos. ¡Por eso te adoran los ejércitos del cielo!

«Así dice el Señor, tu Redentor, quien te formó en el seno materno: »“Yo soy el Señor, que ha hecho todas las cosas, yo solo desplegué los cielos y extendí la tierra. ¿Quién estaba conmigo?

»¡Ah, Señor mi Dios! Tú, con tu gran fuerza y tu brazo poderoso, has hecho los cielos y la tierra. Para ti no hay nada imposible.

»Con su poder hizo el Señor la tierra; con su sabiduría afirmó el mundo; con su inteligencia extendió los cielos.

porque él habló, y todo fue creado; dio una orden, y todo quedó firme.

Con sabiduría afirmó el Señor la tierra, con inteligencia estableció los cielos.

Gritaba a gran voz: «Temed a Dios y dadle gloria, porque ha llegado la hora de su juicio. Adorad al que hizo el cielo, la tierra, el mar y los manantiales».

Que recibáis bendiciones del Señor, creador del cielo y de la tierra.

―Señores, ¿por qué hacéis esto? Nosotros también somos hombres mortales como vosotros. Las buenas nuevas que os anunciamos son que dejéis estas cosas sin valor y os volváis al Dios viviente, que hizo el cielo, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos.

Al que con inteligencia hizo los cielos; su gran amor perdura para siempre.

Dios hizo la tierra con su poder, afirmó el mundo con su sabiduría, ¡extendió los cielos con su inteligencia!

para nosotros no hay más que un solo Dios, el Padre, de quien todo procede y para el cual vivimos; y no hay más que un solo Señor, es decir, Jesucristo, por quien todo existe y por medio del cual vivimos.

Cuando contemplo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que allí fijaste,

En el principio tú afirmaste la tierra, y los cielos son la obra de tus manos.

Porque toda casa tiene su constructor, pero el constructor de todo es Dios.

Nuestra ayuda está en el nombre del Señor, creador del cielo y de la tierra.

en estos días finales nos ha hablado por medio de su Hijo. A este lo designó heredero de todo, y por medio de él hizo el universo.

Toda obra del Señor tiene un propósito; ¡hasta el malvado fue hecho para el día del desastre!

Por la palabra del Señor fueron creados los cielos, y por el soplo de su boca, las estrellas.

Mi ayuda proviene del Señor, creador del cielo y de la tierra.

Esta profecía es la palabra del Señor con respecto a Israel. Afirma el Señor, que extendió los cielos, que echó los cimientos de la tierra, y que puso en el hombre aliento de vida:

¿Acaso no lo sabes? ¿Acaso no te has enterado? El Señor es el Dios eterno, creador de los confines de la tierra. No se cansa ni se fatiga, y su inteligencia es insondable.

¡Oh Señor, cuán numerosas son tus obras! ¡Todas ellas las hiciste con sabiduría! ¡Rebosa la tierra con todas tus criaturas!

Todos los dioses de las naciones no son nada, pero el Señor ha creado los cielos.

y juró por el que vive por los siglos de los siglos, el que creó el cielo, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos, y dijo: «¡El tiempo ha terminado!

Porque todas las cosas proceden de él, y existen por él y para él. ¡A él sea la gloria por siempre! Amén.

Cuando lo oyeron, alzaron unánimes la voz en oración a Dios: «Soberano Señor, creador del cielo y de la tierra, del mar y de todo lo que hay en ellos,

Desde antes que nacieran los montes y que crearas la tierra y el mundo, desde los tiempos antiguos y hasta los tiempos postreros, tú eres Dios.

He puesto mis palabras en tu boca y te he cubierto con la sombra de mi mano; he establecido los cielos y afirmado la tierra, y he dicho a Sión: “Tú eres mi pueblo”».

«Señor Todopoderoso, Dios de Israel, entronizado sobre los querubines: solo tú eres el Dios de todos los reinos de la tierra. Tú has hecho los cielos y la tierra.

creador del cielo y de la tierra, del mar y de todo cuanto hay en ellos, y que siempre mantiene la verdad.

Que desde Sión os bendiga el Señor, creador del cielo y de la tierra.

Yo soy el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin.

Lo que ha sido desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros propios ojos, lo que hemos contemplado, lo que hemos tocado con las manos, esto os anunciamos respecto al Verbo que es vida.

porque serán días de tribulación como no la ha habido desde el principio, cuando Dios creó el mundo, ni la habrá jamás.

Alzad los ojos y mirad a los cielos: ¿Quién ha creado todo esto? El que ordena la multitud de estrellas una por una, y llama a cada una por su nombre. ¡Es tan grande su poder, y tan poderosa su fuerza, que no falta ninguna de ellas!

Pero, si envías tu Espíritu, son creados, y así renuevas la faz de la tierra.

Nada son los dioses de los pueblos, pero el Señor fue quien hizo los cielos;

También me dijo: «Ya todo está hecho. Yo soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin. Al que tenga sed le daré a beber gratuitamente de la fuente del agua de la vida.

y de hacer entender a todos la realización del plan de Dios, el misterio que desde los tiempos eternos se mantuvo oculto en Dios, creador de todas las cosas.

¿Has olvidado al Señor, que te hizo; al que extendió los cielos y afirmó la tierra? ¿Vivirás cada día en terror constante por causa de la furia del opresor que está dispuesto a destruir? Pero ¿dónde está esa furia?

»Prestad atención, voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva. No volverán a mencionarse las cosas pasadas, ni se traerán a la memoria.

»Escribe al ángel de la iglesia de Laodicea: Esto dice el Amén, el testigo fiel y veraz, el soberano de la creación de Dios:

Acuérdate de tu creador en los días de tu juventud, antes que lleguen los días malos y vengan los años en que digas: «No encuentro en ellos placer alguno»;

En aquel tiempo Jesús dijo: «Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque habiendo escondido estas cosas de los sabios e instruidos, se las has revelado a los que son como niños.

Y cuando terminó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le dio las dos tablas de la ley, que eran dos tablas de piedra escritas por el dedo mismo de Dios.

Él se basta para extender los cielos; somete a su dominio las olas del mar.

¿Acaso vosotros no lo sabíais? ¿No os habíais enterado? ¿No se os dijo desde el principio? ¿No lo entendisteis desde la fundación del mundo?

y en su presencia oró así: «Señor, Dios de Israel, entronizado sobre los querubines: solo tú eres el Dios de todos los reinos de la tierra. Tú has hecho los cielos y la tierra.

En respuesta, Hiram, rey de Tiro, le envió a Salomón la siguiente carta: «El Señor te ha hecho rey de su pueblo, porque te ama.

me pregunto: «¿Qué es el hombre, para que pienses en él? ¿Qué es el ser humano, para que lo tengas en cuenta?»




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