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Referencias Cruzadas

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Ester 2:18

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Luego el rey ofreció un gran banquete en honor de Ester para todos sus funcionarios y servidores. Declaró un día de fiesta en todas las provincias y distribuyó regalos con generosidad digna de un rey.

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14 Referencias Cruzadas  

El ángel me dijo: «Escribe: “¡Dichosos los que han sido convidados a la cena de las bodas del Cordero!”» Y añadió: «Estas son las palabras verdaderas de Dios».

Los habitantes de la tierra se alegrarán de su muerte y harán fiesta e intercambiarán regalos, porque estos dos profetas les estaban haciendo la vida imposible.

―Cuando alguien te invite a una fiesta de bodas, no te sientes en el lugar de honor, no sea que haya algún invitado más distinguido que tú.

«El reino de los cielos es como un rey que preparó un banquete de bodas para su hijo.

He entrado ya en mi jardín, hermana y novia mía, y en él recojo mirra y bálsamo; allí me sacio del panal y de su miel; allí bebo mi vino y mi leche. ¡Comed y bebed, amigos, y embriagaos de amor!

¡Salid, mujeres de Sión! ¡Contemplad al rey Salomón! ¡Lleva puesta la corona que le ciñó su madre el día en que contrajo matrimonio, el día en que se alegró su corazón!

como el tiempo en que los judíos se libraron de sus enemigos, y como el mes en que su aflicción se convirtió en alegría, y su dolor en día de fiesta. Por eso debían celebrarlos como días de banquete y de alegría, compartiendo los alimentos los unos con los otros y dándoles regalos a los pobres.

En copas de oro de las más variadas formas se servía el vino real, el cual corría a raudales, como era de esperarse del rey.

También los levitas tranquilizaban a todo el pueblo. Les decían: «¡Tranquilos! ¡No estéis tristes, que este es un día santo!»

Pregúntales a tus criados, y ellos mismos te lo confirmarán. Por tanto, te agradeceré que recibas bien a mis hombres, pues este día hay que celebrarlo. Dales, por favor, a tus siervos y a tu hijo David lo que tengas a mano”».

Labán reunió a toda la gente del lugar y ofreció una gran fiesta.

Por fin se presentó la oportunidad. En su cumpleaños, Herodes dio un banquete a sus altos oficiales, a los comandantes militares y a los notables de Galilea.




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