Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




2 Samuel 18:9

Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Absalón, que huía montado en una mula, se encontró con los soldados de David. La mula se metió por debajo de una gran encina, y a Absalón se le trabó la cabeza entre las ramas. Como la mula siguió de largo, Absalón quedó colgado en el aire.

Ver Capítulo Copiar

18 Referencias Cruzadas  

Tenía una cabellera tan pesada que una vez al año tenía que cortársela; y según la medida oficial, el pelo cortado pesaba dos kilos.

»Al que mira con desdén a su padre, y rehúsa obedecer a su madre, que los cuervos del valle le saquen los ojos y que se lo coman vivo los buitres.

¿No es acaso la ruina para los malvados y el desastre para los malhechores?

Cristo nos rescató de la maldición de la ley al hacerse maldición por nosotros, pues está escrito: «Maldito todo el que es colgado de un madero».

Por ejemplo, Moisés dijo: “Honra a tu padre y a tu madre”, y: “El que maldiga a su padre o a su madre será condenado a muerte”.

El que huya del terror caerá en la fosa; el que salga de la fosa caerá en la trampa; porque yo hago venir sobre Moab el tiempo de su castigo —afirma el Señor—.

Al que maldiga a su padre y a su madre, su lámpara se le apagará en la más densa oscuridad.

―No voy a malgastar mi tiempo contigo —replicó Joab. Acto seguido, agarró tres lanzas y fue y se las clavó en el pecho a Absalón, que todavía estaba vivo en medio de la encina.

Ajitofel, por su parte, al ver que Absalón no había seguido su consejo, aparejó el asno y se fue a su pueblo. Cuando llegó a su casa, después de arreglar sus asuntos, fue y se ahorcó. Así murió, y fue enterrado en la tumba de su padre.

“Maldito sea quien se acueste con la mujer de su padre, pues con tal acción deshonra el lecho de su padre”. Y todo el pueblo dirá: “¡Amén!”

“Maldito sea quien deshonre a su padre o a su madre”. Y todo el pueblo dirá: “¡Amén!”

no dejarás el cuerpo colgado durante la noche, sino que lo sepultarás ese mismo día. Porque cualquiera que es colgado de un árbol está bajo la maldición de Dios. No contaminarás la tierra que el Señor tu Dios te da como herencia.

Entonces Judas arrojó el dinero en el santuario y salió de allí. Luego fue y se ahorcó.

Los criados hicieron con Amnón tal como Absalón les había ordenado. Entonces los otros hijos del rey se levantaron y, montando cada uno en su mula, salieron huyendo.

La batalla se extendió por toda el área, de modo que el bosque causó más muertes que la espada misma.

Un soldado que vio lo sucedido le dijo a Joab: ―Acabo de ver a Absalón colgado de una encina.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios