Jesús les dijo a los fariseos y maestros de la Ley:
'¡Qué mal les va a ir, hipócritas! Ustedes les cierran la puerta del reino de Dios a los demás. Y ni entran ustedes, ni dejan que otros entren.
El que recibe un salario por cuidar a las ovejas, huye cuando ve que se acerca el lobo. Deja a las ovejas solas, porque él no es el pastor y las ovejas no son suyas. Por eso, cuando el lobo llega y ataca a las ovejas, ellas huyen por todos lados.
Sabemos que la ley de Moisés tiene valor para los que se someten a ella. Y lo que la ley dice es para que nadie pueda declararse inocente; es para que todo el mundo se reconozca culpable ante Dios.
Además, se vuelven perezosas y se acostumbran a andar de casa en casa, llevando y trayendo chismes, y metiéndose en asuntos ajenos y hablando de lo que no deben.
Pero si alguna viuda tiene hijos o nietos, ellos deben ser los primeros en ayudarla en todas sus necesidades, así como ella antes los cuidó y ayudó. Esto es lo que conviene hacer ante Dios, pues así quiere él que se haga.
y peleas en todo momento. Y los que hacen eso son gente incapaz de pensar bien, que no conoce la verdad; son gente que piensa que por medio de la religión puede ganar mucho dinero.
Dios les ha encargado a los líderes de la iglesia que vigilen el trabajo de todos, para que todo se haga bien. Por eso, no deben ser tiranos, ni enojarse con facilidad, ni emborracharse. Tampoco deben ser violentos, ni tramposos en sus negocios.
No deberán creer ni enseñar otro mensaje que no sea el verdadero mensaje recibido de Dios. Así podrán animar a otros por medio de la buena enseñanza y convencer a los que se oponen a ella.