Mientras Pedro hablaba, una nube brillante vino y se detuvo sobre ellos. Desde la nube se oyó una voz que decía: 'Este es mi Hijo, yo lo amo mucho y estoy muy contento con él. Ustedes deben obedecerlo'.
y el Espíritu Santo bajó sobre él en forma de paloma. Luego se oyó una voz que desde el cielo decía: 'Tú eres mi Hijo a quien quiero mucho. Estoy muy contento contigo'. Los antepasados de Jesús
Nosotros estábamos allí cuando Dios el Padre trató a Jesús con mucho honor y mostró lo maravilloso que es él. Y allí mismo, en la montaña sagrada, oímos cuando nuestro grande y maravilloso Dios dijo: 'Éste es mi Hijo. Yo lo amo mucho y estoy muy contento con él'.
Después oí una voz que venía del cielo. Era como el estruendo de enormes cataratas o como el fuerte resonar del trueno; era un sonido semejante al de muchos músicos tocando arpas.