No dejen que nadie se aleje del amor de Dios. Tampoco permitan que nadie cause problemas en el grupo, porque eso les haría daño; ¡sería como una planta amarga que los envenenaría!
'Escribe al ángel de la iglesia de Sardes:
'Yo tengo los siete espíritus de Dios y las siete estrellas. Escucha lo que te voy a decir:
'Estoy enterado de todo lo que haces, y sé que tienes fama de obedecerme fielmente. Pero eso no es verdad.