'Como pueden ver, ahora vamos a Jerusalén. Y a mí, el Hijo del hombre, me entregarán a los sacerdotes principales y a los maestros de la Ley. Ellos dirán que debo morir,
Desde ese momento, Jesús comenzó a decirles a sus discípulos lo que le iba a pasar: 'Tendré que ir a Jerusalén, y los líderes del país, los sacerdotes principales y los maestros de la Ley me harán sufrir mucho. Allí van a matarme, pero tres días después volveré a vivir'.
'Ustedes saben que dentro de dos días se celebrará la fiesta de la Pascua. Durante la fiesta, yo, el Hijo del hombre, seré apresado y moriré clavado en una cruz'.
'Desde el principio, Dios ya había decidido que Jesús sufriera y fuera entregado a sus enemigos. Ustedes lo ataron y lo entregaron a los romanos para que lo mataran.