Cuando llegaron allá, se fueron a vivir a un pueblo llamado Nazaret. Así se cumplió lo que Dios había dicho por medio de los profetas: 'El Mesías será llamado nazareno'.
Entonces él les contestó:
--A un fprofeta se le reconoce y se le acepta en todas partes, menos en su propio pueblo, en su propia familia y en su propia casa.