Marcos 2:17

Biblia Lenguaje Sencillo (Nuevo Testamento)

Jesús los oyó y les contestó: --Los que necesitan al médico son los enfermos, no los sanos. Y yo vine a invitar a los fpecadores para que regresen a Dios, no a los que se creen buenos. Jesús enseña sobre el ayuno

Referencias Cruzadas

Mateo 18:10

'Recuerden: No desprecien a ninguno de estos pequeños, porque a ellos los cuidan los ángeles más importantes de Dios. La oveja

Lucas 15:10

'De la misma manera, los ángeles de Dios hacen fiesta cuando alguien se vuelve a Dios'. El padre amoroso

Lucas 15:29

Pero él, muy enojado, le dijo: 'He trabajado para ti desde hace muchos años, y nunca te he desobedecido. Pero a mí jamás me has dado siquiera un cabrito para que haga una fiesta con mis amigos.

Lucas 15:7

'De la misma manera, hay más alegría allá en el cielo por una de estas personas que se vuelve a Dios, que por noventa y nueve personas buenas que no necesitan volverse a él'. La moneda

Lucas 16:15

Entonces Jesús les dijo: 'Ustedes tratan de aparecer delante de los demás como personas muy honestas, pero Dios los conoce muy bien. Lo que la mayoría de la gente considera de mucho valor, para Dios no vale nada.

Lucas 19:10

Yo, el Hijo del hombre, he venido para buscar y salvar a los que viven alejados de Dios. Los diez empleados

Juan 9:34

Entonces le contestaron: --Ahora resulta, que tú siendo pecador desde que naciste nos vas a enseñar. ¡Ya no te queremos en nuestra sinagoga!

Juan 9:40

Algunos fariseos que estaban por allí le oyeron decir esto, y le preguntaron: --¿Quieres decir que nosotros también somos ciegos?

Hechos 20:21

A los judíos y a los que no son judíos les he dicho que le pidan perdón a Dios y crean en nuestro Señor Jesucristo.

Hechos 26:20

Por eso, primero anuncié el mensaje a la gente de Damasco, y luego a la de Jerusalén y a la de toda la región de Judea. También hablé con los que no eran judíos, y les dije que debían pedirle perdón a Dios y obedecerle, y hacer lo bueno para demostrar que en verdad se habían arrepentido.

Tito 2:14

Él quiso morir para rescatarnos de todo lo malo y para purificarnos de nuestros pecados. Al hacerlo, nos convirtió en su pueblo, en un pueblo decidido a hacer el bien.