Después de oír la voz, los discípulos vieron que Jesús había quedado solo. Y durante algún tiempo no le contaron a nadie lo que habían visto. Jesús sana a un muchacho
Mientras bajaban del cerro, Jesús les ordenó: --No le cuenten a nadie lo que han visto hasta que yo, el Hijo del hombre, muera y resucite.
Los discípulos estaban muy asustados, y Pedro se puso a hablar sin pensar en lo que decía.